Según un
estudio realizado por un portal femenino de Argentina, el 60 por ciento de las
encuestadas ha afirmado haber tenido una
relación extra matrimonial.
Más de
2700 mujeres han sido interrogadas sobre posibles aventuras románticas y
solamente el 15 por ciento aseguró que no se anima ni en fantasías a concretar
una relación por miedo a perder el trabajo y su pareja actual.
Lo cierto
es que los
romances de oficina no son fáciles. “La empresa tiende a separar a
los trabajadores que se enamoran porque el nivel de eficacia puede verse
afectado y nadie está dispuesto a correr riesgos.
La mayoría de los empleados
siempre preferirá mantener en secreto el vínculo por temor a ser perjudicados”,
explica la Licenciada en Recursos Humanos, la argentina Carla Mascia.
Las
empresas hoy en día quieren contratar gente joven. “La gente joven en general
es soltera y como se trabajan tantas horas es habitual enamorarse de un
compañero de trabajo.
Por un lado, se puede pensar que desarrollar un trabajo en
un ambiente agradable y motivado beneficia la productividad y la eficacia, pero
también es posible mirarlo desde otra perspectiva: los amores de oficina pueden
hacer que el nivel intelectual decaiga y ante cualquier problema que surja en la
relación, dañará la evolución del empleo e incluso la relación laboral que
mantenga la pareja”, comenta la profesional.
¿Qué hacer con los amores de oficina?
·
La generación de un reglamento interno es importante si se quieren evitar
problemas. “El código de ética es de vital importancia, sin importar que la
empresa sea pequeña o una multinacional. Es bueno para evitar complicaciones y
malos entendidos”, expresa Mascia.
·
Los empleados tienen que leer muy detenidamente el contrato que firman al
incorporarse al trabajo, ya que en muchos casos se establece de antemano un
apartado en donde se menciona el respeto de las condiciones acordadas y si el
trabajador no las cumple, puede ser despedido.
·
La pareja tiene que analizar muy bien las prioridades. “Hay que tener en
cuenta que si el vínculo amoroso aflora y los superiores sienten que esta
relación perjudicará el entorno y el trabajo en sí, uno de los dos podrá ser
trasladado. Es una de las alternativas que es mejor saber de antemano”,
opina la Licenciada.
La
encuesta ha evidenciado un dato importante que no se puede ocultar. “Si esto
está pasando es por algo y hay que revalorizar toda una situación que puede ser
perjudicial para ambas partes.
La flexibilidad por parte de los empleadores y
una negociación con sus empleados puede contribuir a crear el clima apto de
trabajo, pero siempre se deben establecer de entrada, a modo preventivo cuando
se tiene intenciones de contratar a un profesional”, finaliza diciendo
Mascia.
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