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Orientación vocacional: un momento de decisión

Faltan sólo unos meses para terminar la secundaria. Y ahora… ¿qué hacer? ¿Cómo seguir? ¿Qué carrera? Que trabajo?

Preguntas
estas que se formulan tanto padres como hijos: ¿cómo seguir?.

Difícil
decisión cuando se piensa que es la única posibilidad de elegir en la vida…
Pero… es la única posibilidad de elegir ?… 

Nos
ponemos nerviosos, inseguros y presionados por la sociedad que nos dice: “
tenes que tener éxito… ser el mejor… ganar mucho dinero y así tendrás la
felicidad… “ La felicidad… pero… donde encontrarla?

Quizás en el trabajo
placentero, en el estudio elegido, en la pareja querida en… utopía esta que
nos parece solo palabras cuando estamos frente a la terminación de un ciclo y
el comienzo de otro desconocido. 

Este
momento se caracteriza por la incertidumbre, saber que si elijo una carrera
determinada, un oficio o un trabajo necesariamente pierdo todo lo que no elijo,
un mundo se abre pero otro sin excepción se cierra y esto duele porque elegir
nos da libertad pero al mismo tiempo se reafirma que en cada elección algo queda perdido, lo no elegido también lo
añoramos porque quisiéramos tener todo y eso… es imposible. 

Una
buena elección nos crea la fantasía de que tendremos éxito… expectativa esta
demasiado grande para la realidad en que vivimos…

Pero ¿porque no pensar en
lo que nos gusta, en lo que sabemos y podemos hacer, en nuestras limitaciones y
las de la situación socioeconómica? Pensar en posibilidades reales ajustadas  a la realidad y a nuestros deseos…
acercarnos lo más posible a este equilibrio… 

Tarea
difícil que necesita del trabajo conjunto del adolescente y de su familia, ya
que la elección implica una decisión personal, responsable y autónoma.