Respuesta:

Existen 2 medicamentos homeopáticos que se sostienen tienen una acción casi
específica con respecto a la problemática de los
senos “marchitos” o atrofiados:

La Sabal serrulata, que combatiría esa condición cuando es debida a una
disminución hormonal estrogénica, y el Conium maculatum que estaría indicado
cuando la atrofia de mamas es secundaria a una lactancia demasiado prolongada,
pero en mi experiencia profesional nunca he visto que esa acción terapéutica sea
exitosa.

Teniendo en cuenta que todo remedio homeopático puede llegar a provocar lo mismo
que se desea curar (ley de las similitudes), es muy probable que la descripción
de tales efectos esté históricamente basada en los ensayos terapéuticos
experimentales que se realizaron con esas sustancias hace 150 años sobre mujeres
sanas, y que dichos productos provocaran la atrofia experimental, por lo cual se
extrajo como conclusión que en la mujer con “senos caídos” se lograría la
resolución del problema.

Honestamente, no recomiendo su utilización.

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