Cuando alguien acaba de
empezar su negocio, está tan centrada en hacer que
entren los primeros euros que no se fija en como está yendo su actividad.

Las primeras entradas parecen algo maravilloso, porque te dan el impulso a
seguir adelante con tu propósito.

Luego, los meses pasan, y al cabo de un tiempo te das cuenta que han pasado dos
años desde que empezaste y sigues ganando (más o menos) lo que ganabas al
empezar.

¿Qué pasó con tu negocio?

Aquí te paso, algunos de los errores en los cuales, sin darte cuenta, podrías
haber caído:

– Error numero 1: No haber hecho un plan de empresa al empezar

Os prometo que he encontrado a muchas
emprendedoras que no solo no tenían la
remota idea de que fuera un plan de empresa, sino que incluso no lo habían hecho
antes de empezar (¡ni un pequeño esbozo en un papel!).
¡Wow! ¡Que peligro! Un buen plan de empresa, te permite aclararte sobre tu
negocio. No tendrás centenares de ideas esparcidas en tu cabeza, sino que las
tendrás escrita en un documento que tú habrás redactado (con mucho cariño).

Un buen plan de empresa te permitirá:

• 
  Saber cual es tu mercado y conocerlo (estudiarlo)

• 
  Saber quienes son tus clientes y que características tienen

• 
  Saber como estructurar la organización de tu actividad y de tu tiempo

• 
  Hacer algunos cálculos básicos y necesarios para saber si necesitas una
  financiación o si te abasteces con los recursos que tienes etc…..

Un plan
de empresa (Business plan) no es una perdida de tiempos es una
clara visión estratégica sobre tu negocio y tu futuro.

Primero estrategia, luego acción.

– Error numero 2: No pagarte un salario

No pagarse un salario a final del mes y conformarse con lo que queda, es como
decirse a una misma que no vales mucho y que tu trabajo tampoco.
¡No seas este tipo de emprendedora!

Elige un importe que quieres para ti cada mes o cada semana y luego, procura
alcanzarlo, ponértelo como objetivo.
p
Es increíble ver que a medida que te vayas marcando objetivos de este tipo, cada
vez, te resultará más fácil llegar a conseguirlo cada mes.

Si al principio, tienes un poco de miedo a apostar por ti mucho dinero, entonces
pon una cifra que te parece alcanzable fácilmente y cuando la tengas bien
conseguida sube el nivel.

– Error numero 3: no tener una cuenta corriente de negocio

¿Tu dinero entra y sale de una sola cuenta? ¿Estás pagando tus vacaciones con la
misma cuenta con la cual pagas a tu webmaster?

¡Ups! ¡Tenemos un problema!

El tener una cuenta única en la cual confluir gastos y pagos personales con los
gastos y pagos de la empresa, genera un caos enorme, no solo para hacer cuenta
al final del mes, sino también para la declaración de la renta de cada año (he
visto a emprendedoras no saber tomar decisiones firmes y rápida, por no saber lo
que tenían a su disposición en liquidez).

Te aconsejo que abras una cuenta para tu actividad en la cual te manejes con el
dinero de tu negocio.

Ventajas:

• 
   Siempre estarás al tanto de la liquidez de tu empresa,

• 
  No tendrás dolor de cabeza al final del mes cuando tendrás que hacer un
  verdadero “inventario” de las actividades del mes y sacar gastos que no son
  del negocio

• 
  Y podrás asignarte un salario al mes (o a la semana) que irá a tu cuenta
  personal.

– Error numero 4: hacer tu propia declaración de la renta y las declaraciones
trimestrales

Hace un mes asesoré a una emprendedora que tiene una tienda de golosinas, la
chica me decía que de las declaraciones trimestrales se encargaba ella
personalmente, porque había hecho un curso de 10 horas sobre el tema.
Cuando me di cuenta de la magnitud del desastre administrativo que rastreaba
desde hace varios meses, le aconsejé que se dirigiese a un consultor financiero
o una gestoría.

No podemos hacerlo ni especialmente, saberlo todo.

Los temas fiscales, a veces, resultan tan engorrosos cuanto complicados. Si tu
negocio no es llevar la gestión de otra empresa (en este caso el consejo no
vale), te aconsejo que delegues en un/a experto/a. La inversión que hace, aunque
te pueda resultar difícil gastarte ese dinero, te permitirá no tener apuros y
sorpresas inesperadas en caso de controles fiscales.

– Error numero 5: no crear limites bien definido entre tu trabajo como
emprendedora/empresaria y tus amigos y familiares

Si tu familia y tus amigos no toman en serio tu negocio, te aconsejo pensar en
la forma en la cual comunicarles tu decisión y tu iniciativa empresarial.

¿Por qué tengo que comunicarles mi negocio?

Por mucha razones:

• 
   A la gente que no tiene un negocio, le cuesta entender lo que haces
• 
  Hasta cuando no les comuniques que vas en serio, no te tomaran en serio
  
• 
  Si le comunicas lo que haces podrían convertirse en tu aliados y ayudarte en
  tus objetivos. Por ejemplo, mi madre es la mejor colaboradora en PR public
  relation de la cual dispongo, y aunque divulgue información sobre mi negocio
  en Italia (donde de momento, no estoy operando), siento que su apoyo alienta
  mi misión. Mi padre, que de joven fue marinero, me envía metáforas preciosas
  sobre el mar y de la navegación como alegorías de la vida, muchas de ellas
  las utilicé en mi eBook “tu brújula en los negocios”.

• 
  Además, poner limites claros, te permitirá poner un horario a tu actividad,
  dentro del cual tú tienes el derecho de limitar llamadas y visitas
  personales.

¿le ves el sentido?

Así que hónrate a ti y a tu negocio, y encuentra la forma de comunicarte con
ellos de forma constructiva y sincera.

Y ¿tu? ¿En cual error has caído
sin querer? o ¿queriendo caer?

Por
Paola Pozzi – Coaching para emprendedoras
http://emprendedorasbcn.com

El
libro "Fórmula
de Ricos", de Juan Pablo Mendoza del Río, te enseña las 60 fórmulas que debes aplicar para iniciar tu
camino hacia la
riqueza. Encuéntralo haciendo
clic aquí