|
Transforme
una vieja botella en el mejor de los regalos
EL EMPASTE
A una determinada cantidad de polvo,
que variara según las dimensiones de la botella, se ira añadiendo
gradualmente un poco de agua, y se empezara a empastar, hasta conseguir
una masa compacta y homogénea, como la masilla para cristales.
La operación estará terminada tan pronto como la pasta
ya no se pegue en las manos.
Para este trabajo podemos utilizar los guantes de goma
EL REVESTIMIENTO
La pasta ya esta lista. Ahora hay que
recubrir la botella aplicando sobre su superficie una capa uniforme
de pasta.
El material que se va empleando tiene la particularidad de adherirse
perfectamente a cualquier superficie y por consiguiente también
al vidrio, secándose y endureciendo además por si
solo.
Para manipular la pasta conviene las manos mojadas.
LA DECORACION
Una vez completamente revestida la botella,
se pasa a la decoración, que puede realizarse de muchas maneras.
Describiremos varias para que las lectoras elijan la o las que más
les agraden.
EL CEPILLADO:
Se toma la botella recién cubierta
de pasta y se pasa sobre ella, en sentido vertical y horizontal,
un cepillo de plástico. Quedaran marcadas unas señales
que darán la impresión de una corteza de árbol.
Sobre la pasta así tratada puede aplicarse después,
si se quiere, algunos de los otros elementos decorativos.
LAS APLICACIONES:
Una decoración sencillísima, pero al propio tiempo
de gran efecto, es la que se obtiene colocando sobre la botella
las piedras y los vidrios de colores, los caparazones de moluscos
o las pequeñas perlas. Para aplicar estos adornos bastara
incrustarlos en la pasta todavía fresca, cuidando de disponerlos
con buen gusto u alternando los colores. La fantasía hallara
seguramente el modo de satisfacer toda clase de caprichos.
LAS FLORES:
Para modelar una flor bastara aplicar la botella cinco bolitas de
pasta dispuestas en circulo. Se apretara cada bolita con el pulgar
y así modelara en forma de pétalo. En el centro de
la flor pueden colocarse algunas perlas blancas. Es fácil
hacer otras flores utilizando, en lugar de bolitas, unos rollitos
de pasta de unos 6cm de largo por 2 de ancho. Se colocaran igualmente
en círculo, modelándolos con el índice para
darles una linda forma y un poco de movimiento. En el centro de
la flor, que podrá tener la forma de una margarita grande
o de cualquier otra flor sencilla, se colocara una gran piedra brillante
o una gruesa perla.
LAS TRENCITAS:
Háganse unos rollitos de pasta de una longitud de 20- 25
centímetros y del grosor de un lápiz, trenzando tres
de ellos, tal como se hace con el cabello de las niñas. Una
vez terminada la trenza, se coloca con cuidado sobre la botella
y se hace girar a su alrededor.
LAS MARIPOSAS:
Las mariposas se hacen con cuatro bolitas, dos más grandes
encimas y dos pequeñas debajo, prensadas y modeladas en forma
de alas: entre las alas se pone un trocito de pasta, que constituirá
el cuerpo de la mariposa. Sobre las alas pueden ponerse dos bonitas
piedras de colores. Las antenas se trazan cortando la pasta con
un palillo.
EL COLOREADO
En este punto se suspende el trabajo.
El empaste de fondo y los bajorrelieve ornamentales deben sacarse.
Se necesita una noche o más. Después se reemprende
el trabajo para colorear.
Utilizando los pinceles, se pintan el fondo y los motivos decorativos
aplicados con los colores preferidos, procurando no crear contraste
violento. Puede también pintarse todo de un solo color.
EL BARNIZADO
Sobre la pintura todavía fresca
se extiende con cuidado el barniz transparente, que fijara el color
y dará un lindo brillo.
EL DORADO
Sobre el barniz aun sin secar se deja
caer extendida la purpurina de oro para conseguir un reflejo dorado,
procurando que queden manchas o estrías mas intensas. Si
se tiene cuidado de no cubrir por entero el color, se conseguirá
dar al objeto un tono nacarado que le dará un precioso aspecto.
El trabajo ha terminado. La botella,
transformada en un objeto agradable, apto tanto para adorno como
para florero, podrá ser colocada ahora en un lugar preferente.
Pero mejor todavía, podrá utilizarse para una originalísima
y elegante pantalla.
|