La dieta de la sopa tiene su fundamento…
Una sopa antes de comer ayuda a perder peso ya que controla el hambre. En Estados Unidos se ha realizado una investigación sobre las dietas existentes y nueve de los diez menús más exitosos para adelgazar contenían una sopa como entrada.
Las sopas pueden ser frías para degustar en el verano o calientes, ideales cuando las temperaturas son bajas.
Los beneficios de las sopas no solamente tienen relación con la disminución de peso ya que son también recomendadas porque suelen curar enfermedades.
La sopa de pollo es excelente para combatir los resfriados, ya sea casera o enlatada, investigadores han descubierto que ayuda a inhibir la creación de mucosa.
La sopa de remolachas esconde un alto contenido de antioxidantes y hierro y la de zanahoria y jengibre purifican el estómago y la piel.
Toda cultura tiene sus sopas características, preparadas especialmente con alimentos naturales y nutritivos utilizados en beneficio de toda la familia.
“Cuando nos sentimos mal, lo primero que nos ofrecen es una sopa”, reflexiona la nutricionista chilena Marta Mendoza.
“Si son caseras es mucho mejor ya que contendrá sus alimentos frescos, otorga fuerzas al organismo, es muy raro que una sopa caiga mal y levanta el ánimo”, continúa diciendo.
Recetas de sopas fortificantes
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