Feliz navidad, jo, jo,
jo…
La época de las
fiestas o las vacaciones es un momento en donde se llevan a cabo varias celebraciones
y eventos familiares. Muchas veces debemos compartir una mesa con personas que
preferiríamos ni siquiera conocer. Intentemos hacer todo más ameno.
Participe sólo de
los eventos más importantes para usar de una forma más eficiente la energía que
requieren estas reuniones, más aún si no todos los miembros de su familia están
cómodos con su homosexualidad. Recuerde que deben respetarle pero no tienen por
qué sentirse bien con ello, usted también debe respetar sus sentimientos.
Intente llegar
tarde, cuando ya están todos reunidos, o irse temprano, antes de que empiecen a
beber. No asista a ninguna reunión donde no inviten a su pareja. Él o ella es
parte de su familia ahora, de modo que no debe aceptar ningún tipo de
segregación.
Si no le dan la bienvenida, piense en pasarlo con su familia
política o organicen reuniones en su casa y comiencen un nuevo rito anual donde
invitar y disfrutar de quien usted quiera.
No dé por sentada las reacciones de
sus familiares, lo más probables es que lo sorprendan. Tenga en cuenta que no
todos sus familiares piensan de la misma forma, intente pasar el tiempo
conversando con los que se encuentran más cómodos con su homosexualidad. De
esta forma, todo será más ameno.
Organice dónde se quedarán a dormir de ser
necesario. No espere a último momento porque esto puede traerle problemas.
Intente guiar las conversaciones a donde usted se sienta más cómodo. No entre
en discusiones, no es el mejor momento.
Recuerde que puede haber otros miembros
de su familia que tampoco se sienten cómodos participando de la reunión y por
sus propios motivos,
intente acercarse a ellos para darles un apoyo emocional. Todos se sentirán más
cómodos y tal vez puedan disfrutar de una velada placentera.
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