Vacuna contra el HPV (gardasil)I: ¿sí o no?

La vacuna contra el virus del papiloma humano o HPV despierta polémicas. Aquí te contamos cómo orientarte...

La controversia se centra en los posibles efectos adversos que provoca la aplicación del Gardasil (nombre comercial de la vacuna contra el HPV). Se han aplicado ya más de 50 millones de dosis en el mundo, pero se han denunciado 27 muertes y más de diez mil efectos adversos en los Estados Unidos, dos muertes en Europa y 50 reacciones adversas en España.

 En Argentina se han reportado doce casos  sin gravedad, pero el tema causa preocupación para los padres de las adolescentes (público al que va dirigida la colocación de la vacuna). 

Reacciones adversas de la vacuna contra el HPV (Gardasil):


 

          trombosis

          embolia pulmonar

          miocarditis (inflamación del corazón)

          arritmia

          desórdenes neurológicos que causan parálisis muscular

          convulsiones

          verrugas genitales, cara y mano después de recibir la vacuna 

La FDA (Food and Drug Administration), asegura que las muertes reportadas no tienen patrones en común que puedan relacionarse con la aplicación de la vacuna.

Hay que ser muy cautelosos con el tema. Todos los especialistas en ginecología deben tener en cuenta que la aplicación en niñas, puede tener efectos graves ya que no se puede controlar el cuello con Papanicolau y otros exámenes”, sostiene la ginecóloga española Marisa Olmo Suárez

La enfermedad se puede prevenir con el Papanicolau y la colposcopia. “No entiendo por qué hay que someterse a una vacuna que tiene tantos riesgos y que sus resultados pueden ser justamente los opuestos al que se intenta conseguir”, continúa diciendo la especialista. 

Qué puede pasar después de colocarse la vacuna contra el HPV, según aquellos que no están de acuerdo con su aplicación: 

          Que la persona tenga anticuerpos contra los virus que tiene la vacuna y que entonces no tenga efecto en la paciente.

          Que la paciente tenga activos los virus y se produzca una reactivación.

          Que se forme una patología en el cuello del útero y aparezcan otros virus que no tiene la vacuna 

El real impacto de la vacuna no se sabrá hasta pasadas varias décadas. “Se desconoce mucho el alcance que tiene esta vacuna. ¿Previene lesiones cervicales, cáncer, muerte?. ¿Cuánta protección brinda?”, comenta Olmo Suárez.

Hay datos que sugieren que las mujeres vacunadas van a sufrir más abortos y además, con la vacuna, cepas que no revisten peligro podrían volverse agresivas.

“La investigación recién ha comenzado y hay que continuar aclarando las dudas de los especialistas y de los padres de estas niñas que tienen miedo de aplicar una vacuna que no es segura y que en mi caso no suelo recomendar ya que como he mencionado antes, hay otras maneras de prevenir la enfermedad.

Claro que hay muchas mujeres que mueren al año como consecuencia de un cáncer de cuello de útero, y por tal motivo, el estudio de la vacuna debe seguir desarrollándose para que brinde más seguridad que incertidumbre. Mientras tanto, las consultas y controles periódicos son la opción más segura”, opina la profesional.