Expendedora de jabón
Después de utilizar las
instalaciones sanitarias - especialmente baños públicos - es necesario lavarse
las manos, ¿correcto? Pero, ¿qué hacer si el jabón de la expendedora del baño
tiene la misma cantidad de gérmenes que el inodoro que acaba de utilizar?
Esta
no es una pregunta tan descabellada, según algunos investigadores..
Después de probar 132 expendedoras de jabón en baños públicos y restaurantes,
hallaron que el 23 por ciento estaban contaminadas con diversas bacterias, todas patógenas
(lo
que significa que pueden causar enfermedades).
Más preocupante aún es que los investigadores no creen
que los gérmenes sobrevivan a pesar del jabón. Por el contrario, creen que los
microbios están metabolizando los productos químicos del jabón para mantenerse
con vida.
Entonces, ¿qué hacer al salir de un baño público? Busque expendedoras
que contengan bolsas desechables selladas, que tienden a estar libres de
bacterias.
Si no hay ninguna disponible, lleve con usted un poco de alcohol en
gel y límpiese las manos con él. Usar agua sin jabón, incluso agua caliente, no
será muy útil para eliminar las bacterias de la piel.
Lavarropa
Lo que es bueno para sus manos también debe ser bueno
para la ropa, ¿verdad? No tan rápido. Por un lado, su lavarropa recibe docenas
de prendas cada vez que usted lo enciende.
Eso significa que debe limpiar un
área mucho más grande que la de sus manos. Y no crea que una remera sucia tiene
menos bacterias que la piel. De acuerdo con
los expertos en gérmenes,
una carga de ropa interior puede transmitirle alrededor de 500 millones de
bacterias E. coli al lavarropa.
Si usted utiliza un lavarropa
de carga frontal, que no siempre pueden expulsar toda el agua del ciclo de
lavado, estas bacterias pueden nadar tranquilamente hasta que llegue la
siguiente carga. En esencia, estará lavando la ropa sucia con agua contaminada.
Una solución mejor (aparte de tirar la ropa después de
cada uso) es lavar las prendas blancas primero con blanqueador de cloro.
Siga
este procedimiento con las cargas de ropa interior, usando agua caliente y una
variedad de lejía que no destiña. Una vez al mes, usted debe ejecutar un ciclo
de lavado vacío, colocando únicamente un poco de lejía.
Esto desinfectará su
lavarropa y reducirá el número de bacterias en su ropa.
Dinero
A todos les gusta tener la billetera llena - el olor del cuero y los billetes,
los bolsillos rebosantes de tarjetas de crédito, el traqueteo de las monedas.
Si
tiene la suerte de poseer tales riquezas, puede que deba considerar las otras
cosas que carga en su billetera. Los estudios sugieren que el dinero puede ser
un buen hogar para los microorganismos patógenos.
Un estudio realizado en 2002
en Estados Unidos
halló que el 94 por ciento de los billetes de US$
1 contenía
bacterias que causan enfermedades.
Otro estudio realizado en
Inglaterra
encontró que
el 8 por ciento de las tarjetas y el 6 por ciento de los
billetes estudiados tenían tantas bacterias fecales como las que se pueden
encontrar en un inodoro sucio.
Las monedas también tienen una gran cantidad de
gérmenes,
lo que lleva
a recomendar un buen lavado de manos para cualquier persona que esté en contacto
con monedas durante todo el día.
Esto es especialmente importante en los
restaurantes, en los que las personas que intercambian dinero con los clientes
también están en contacto con los alimentos.