El
color de piel está determinado por la cantidad y tipo del pigmento melanina en
ella. Existen dos tipos de melanina: la feomelanina (de rojo a amarillo) y
la eumelanina (de marrón oscuro a negro).

Lo primero, entonces, es determinar cuál es el tono de su piel. Las personas –y
sus tonos de piel– se dividen en “estaciones”, depende de cuál sea su tono.

Las
personas de “invierno” tienen tonos subcutáneos azules o rosados. Su piel puede
ser pálida, amarillenta o tirando a oscura. Las personas de “invierno” son
generalmente morochas, y mucha gente de ascendencia asiática o africana caen
dentro de esta categoría.

También
las personas de “verano” poseen tonos subcutáneos azules o rosados igual que
las de “invierno”. Su piel es rosada y pálida. Las personas de “verano” suelen
ser rubias o morochas de ojos pálidos.

La
gente que puede clasificarse como de “otoño” tiene tonos subcutáneos dorados.
Muchas pelirrojas y morochas con ojos color miel pueden clasificarse en esta
categoría.

Por
último, aquellas personas de “primavera” también poseen tonos subcutáneos
dorados y generalmente tienen piel color durazno o crema. Las personas de esta
categoría suelen ser rubias o pelirrojas, tener pecas, mejillas
rosadas y ojos verdes o azules.

A menudo es difícil diferencias una complexión invernal de una de verano, y lo
mismo pasa con la primavera y el otoño.

Para estar seguros, recordemos que las personas de invierno son generalmente
morenas, mientras que las de verano suelen ser rubias naturales.

Por su parte, las de primavera en su mayoría tienen ojos claros, mientras que
las otoñales se inclinan hacia los tonos oscuros en sus ojos.

Eligiendo
la ropa adecuada

Las personas de invierno deben usar colores de ropa brillantes, lisos y claros.
Blanco, negro, azul marino, rojo y rosa son colores que se combinan
perfectamente con un tono de piel invernal.

Si se opta por colores menos definidos, es preferible inclinarse por tonos fríos
en vez de colores pastel. Evitar en lo posible los tonos suavizados como beige,
naranja o dorado.

Los que entren en la categoría de verano, en cambio, sí deberían inclinarse
hacia los colores pastel y los colores suaves o neutrales, de tonalidades rosas
y azules.

Lavanda, ciruela y azul oscuro le sientan de maravillas a las personas de
verano, mientras que deberán mantenerse alejados del negro y el naranja.

Si
su piel entra en la categoría otoñal, la ropa que elija deberá tener subtonos
dorados, como los colores camello, beige, naranja, dorado y marrón oscuro.

No darán un buen resultados los colores de la gama del azul, como por ejemplo el
azul marino.

Finalmente,
las personas de la categoría primavera pueden usar colores parecidos: beige,
camello, amarillo dorado y marrón dorado. Pero nunca colores oscuros o
apagados.

Consejos para maquillarse

Quienes tienen un tono de piel mixto deben combatir dos problemas: combatir el tono
apagado y al mismo tiempo evitar los brillos de la piel mixta.

Los maquillajes
luminosos de última generación seguramente serán útiles, pero antes de aplicar
el del tono elegido, lo ideal es aplicarse un concentrado regulador o normalizador para pieles mixtas que evite un exceso de brillo.

Una
vez a la semana, también es aconsejable usar mascarillas revitalizantes o bien
seguir un tratamiento regenerador nocturno para combatir los signos de fatiga.

En casos especiales como algún evento social importante, se puede usar una
ampolla de concentrado revitalizante antes de maquillarse.

Por último, un suplemento de vitamina A y E siempre ayuda a tener mejor piel,
pero lo realmente bueno es tomar el aire, hacer algo de actividad al aire libre
y aprovechar el buen tiempo.

Y nunca está de más aplicarse una crema hidratante con protección solar.

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