Para mucha gente, el hecho de que alguien no quiera viajar en avión a causa de
los dolores de oídos, podría parecerle algo ridículo. Sin embargo, muchos de
ellos no saben que, debido a ciertas condiciones previas, una gran cantidad de
personas sufre de un dolor mucho más intenso que el experimentado por la
mayoría. La buena noticia, es que esto tiene solución.
El intenso dolor que estas personas sienten en sus oído -o incluso la pérdida
temporal de la audición- durante el despegue, el aterrizaje o el vuelo, es un
problema específico que tiene una denominación propia, aerotitus. Este trastorno
explica porqué alguna gente odia volar, mientras que a otros no les incomoda en
absoluto.
Las estadísticas marcan que un tercio de las personas sufre de dolores y
molestias durante los vuelos, pero estas proporciones aumentan en el caso de las
personas más adultas, por lo que no son pocos los mayores que pueden llegar a
dejar de tomarse unas buenas vacaciones por este problema.
La razón por la que se experimenta este trastorno es el repentino cambio en la
presión del aire dentro de la cabina del avión. El aire debería entrar y salir a
través de la trompa de Eustaquio del oído, para normalizar el tímpano.
Sin embargo, la trompa de Eustaquio puede tener dificultades para adaptarse a
estos repentinos cambios de presión, tanto durante el despegue como durante el
aterrizaje. Este dolor puede también agudizarse cuando la trompa de Eustaquio no
puede adaptarse lo suficientemente rápido.
Los factores que pueden hacer que este trastorno sea más agudo o frecuente,
tienen que ver con el hecho de tener previamente una infección del oído, alguna
congestión, o alergias que lo puedan hacer más propenso al aerotitus.
En este caso, las trompas de Eustaquio ya podrían tener problemas previos, y al
experimentar el cambio de presión de aire durante el vuelo, podría sufrir
mayores dificultades, causando un gran dolor.
Si la persona tiene algunas cicatrices en oído medio, debido a infecciones
crónicas de oído durante su niñez, es posible que la trompa de Eustaquio no
pueda ajustarse correctamente a los cambios de presión, puesto que se encontrará
menos elástico, o más pequeño.
Combatiendo el aerotitus
Se pueden hacer muchas cosas para proteger a sus trompas de Eustaquio durante un
vuelo. Si tiene una infección, una congestión, o alguna alergia, debería esperar
hasta que estos malestares se alivien, antes de tomar un vuelo.
Si no puede dejar de abordarlo, debería tomar algunas medidas para evitar, hasta
donde se pueda, que ese dolor surja durante el vuelo. En primer lugar, debería
consultar con su médico, para que le suministre un descongestivo.
Este medicamento, se deberá ingerir cada 6 horas, un día antes y después de su
vuelo. Esto contraerá las mucosas inflamadas de los canales de sus oídos y
nariz. También puede utilizar un aerosol descongestivo nasal, que se aplica cada
cinco minutos, media hora antes del vuelo y durante el vuelo mismo.
Mascar un chicle durante el vuelo entero -y no sólo al despegar y aterrizar- le
ayudará a abrir más las trompas de Eustaquio, y durante más tiempo. También
existen aplicaciones externas para los oídos, que disminuyen el dolor de oídos
durante el vuelo.
En autos y micros
Es posible que este dolor de oído pueda también ser experimentado en un auto o
en un micro, mientras baja o sube una montaña de una manera muy rápida, con la
ventana cerrada. Por lo tanto, sería muy recomendable que intente bajar siempre,
aunque no sea más que unos pocos centímetros, las ventanillas.
Si es propenso a padecer estos dolores de oídos y está en un micro cuyas
ventanas no pueden ser abiertas, pregúntele al conductor cuales son las medidas
que él mismo toma durante las bajadas o las subidas, para imitar esas prácticas.