QUÉ HACER ENTRE LOS PARTIDOS

En Río, la ruta turística suele comenzar con la famosa estatua del Cristo Redentor, el monte del Pan de Azúcar, y los bares y playas de Copacabana; pero si está buscando un cambio de ritmo y un paisaje impresionante, puede realizar un viaje de un día o un fin de semana a Búzios, Paraty o Petropolis.

São Paulo es menos atractiva, pero es un destino interesante para los amantes de la cultura. El Museo de Arte de esta ciudad ofrece la mejor colección de toda América Latina.

Los viajeros más aventureros pueden optar por algunos de los paisajes naturales más espectaculares.

Para empezar, puede visitar las Cataratas del Iguazú, en la frontera con Argentina; los cañones de Itaimbezinho y su abundante vegetación, en Rio Grande do Sul; el humedal más grande del mundo (y muchos otros ecosistemas) en el Pantanal; las playas, los desiertos y la buena comida de Bahía; y, por supuesto, el Amazonas.

QUÉ COMER

Los platos más comunes se preparan a base de arroz, frijoles y mandioca (o yuca), lo que significa que los vegetarianos nunca pasarán hambre, aunque puede que tengan que buscar un poco para encontrar estos platos.

Brasil es la tierra de las “llanuras Cerrado”, tierra de carne. Para probar la carne de Brasil, vaya a una churrasquería, lo que le garantizará irse con el estómago lleno de carne.

Los paladares más atrevidos deben probar la cocina de Bahía (de raíces africanas), con platos como el bobó de camerão (un plato de camarones con salsa, servido en una especie de cazuela de barro), abadejo y vatapá.

En São Paulo (hogar de la mayor comunidad japonesa fuera de Japón) el sushi y el udon son excelentes. Si quiere comer algo de comida callejera, pruebe los corazones de pollo y los choclos.

ESTAFAS A EVITAR

No es fácil evitar las estafas en Brasil, donde la relación calidad-precio parece ser un concepto extraño.

Para estirar su presupuesto al máximo, alójese, coma y beba en o cerca de una favela pacificada; trasládese en autobús o subterráneo, y coma arroz y frijoles en los restaurante por peso, en los que uno paga por el peso de la comida.

Lo más importante, los turistas deben evitar comprar productos con poca o ninguna utilidad, como la caxirola.

QUÉ TOCAR EN AUSENCIA DE LA VUVUZELA

Si usted siente un repentino deseo de hacer sonar una ruidosa corneta de plástico reciclado, prohibida oficialmente, entonces cómprese un caxirola y comience a soplar; pero no espere que le permitan ingresar su nueva adquisición a los estadios de la Copa Mundial.

Aunque estos ruidosos productos de color amarillo y verde están en la lista de los productos con licencias oficiales de la FIFA, el organismo rector del fútbol mundial prohibió su ingreso a los partidos, después de que decenas de estas cornetas fueran arrojadas al terreno de juego en un evento de prueba.

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