El consenso de toda la
familia es fundamental, todos deben estar de acuerdo y la elección sobre la
mascota qué nos conviene debería ser producto de una reflexión dirigida a
tener la seguridad de que el animal se adaptará sin muchas dificultades a
nuestro estilo de vida.

En algún momento de
nuestra vida casi todos hemos pensado o deseado adquirir un animal de compañía.
Además, los medios de comunicación masivos constantemente realizan reportajes,
trasmiten películas o publicitan campañas que nos hablan de animales, imágenes
que han aumentado el entusiasmo de las personas y especialmente de los niños
por poseer una mascota viva.

El problema con nuestro
"mejor amigo" empieza muchas veces desde que lo adquirimos, sea
mediante compra o adopción, ya que por lo general nunca tomamos en cuenta un
punto clave como es la elección de la especie o la raza que nos conviene.

Sólo
en el caso de los canes existen en la actualidad más de 300 razas puras que
podemos elegir, además de cruzas
o perros criollos. Sin embargo muchas veces nos dejamos influenciar
por la raza de moda, por la que salió en la televisión o en la película, sin
tomar muy en cuenta su tamaño, su temperamento y los cuidados que necesita.

Un gran error que cometen algunos de los propietarios es pensar que sus mascotas
deben procrear para tener mayor bienestar. Si son animales mestizos la Ley de
Protección animal obliga a la esterilización. Una gata abandonada es capaz de
generar una población de 200 individuos en dos años.

Si son animales de raza habría que averiguar primero si los cachorros tienen
colocación; hay animales con pedigrí esperando ser adoptados en las sociedades
protectoras.

¿Cuáles son los motivos que llevan a un dueño a deshacerse de un animal?
Las causas de abandono más frecuentes son las hembras preñadas y los problemas
de comportamiento.

Así nos lo aseguraban desde la Bolsa
de Adopción de Madrid, un servicio realizado por profesores y
estudiantes de veterinaria que de forma voluntaria actúan de intermediarios
entre quienes quieren adoptar una mascota y las instituciones que las protegen.

En el marco de las campañas antiabandono de Purina se dan algunos consejos prácticos
para erradicar este problema:

-Ser un buen dueño requiere preparación.
-No iniciar la experiencia sin haber pedido consejo a amigos y, en especial, al
veterinario.

-La paternidad responsable es tarea del dueño. Supone conocer los celos,
prevenir cubriciones, quizás esterilizar. Recordemos que eliminando las
cubriciones fortuitas, se reduciría el abandono en un 35%. O que el 99% de
gatos callejeros proceden de unos pocos gatos abandonados.

-Los
animales domésticos pertenecen al hogar. No pueden sobrevivir por sus
propios medios. Ya no saben cazar.
-Dejemos la cría de animales a los expertos. La cría correcta de animales domésticos
implica selección, atención cuidadosa y buena socialización.

Algo que deberíamos tener presente es que abandonar animales es una muestra
patente de grave irresponsabilidad hacia los animales, hacia la sociedad y hacia
la propia familia.

Las campañas Antiabandono de Purina
son conocidas en toda España, la primera comenzó en 1988 con el lema “El
nunca lo haría. No lo abandones”, de carácter bianual, pretendiendo la
educación cívica con un objetivo básico: Erradicar el abandono de animales
domésticos.

Actualmente van por la duodécima edición y cuentan con la adhesión de
diversas comunidades autónomas, ayuntamientos y sociedades protectoras.

Mediante encuestas anuales realizan un seguimiento de la evolución de los
abandonos, que en el año pasado alcanzaron la cifra de 74.000 perros y 100.000
gatos en toda España. En los meses de verano el número de abandonos aumenta
pero el drama permanece todo el año.

Paralelamente han editado una guía para viajar con animales y otra de
residencias y sociedades protectoras con el objetivo de ofrecer alternativas
civilizadas al abandono que se pueden solicitar gratuitamente dejando un mensaje
en el contestador 93 2532608 o en el fax 93 2532601.

La labor desempeñada por las sociedades protectoras es meritoria pero también es cierto que
lo ideal sería que dichas sociedades no existieran, porque no debería haber
animales abandonados.

Centros como APROA
en Venezuela tienen actualmente consultorios veterinarios, en los cuáles se les
brinda a las mascotas abandonadas atención sanitaria, pensionado y un retén
para perros y gatos en situación de emergencia. Además llevan a cabo campañas
de esterilización y vacunaciones.

En la Asociación
Nacional de Amigos de los animales de España trabajan en la
divulgación y asesoramiento sobre el correcto cuidado de los animales de compañía,
prevención y denuncia del maltrato hacia los animales y su abandono. Entre sus
actividades está la gestión de su centro de adopción.

La Liga
de Protección de animales y Plantas de Barcelona realiza diferentes
campañas como “Animales de Compañía en la escuela” con el lema “Una
mascota no es un juguete”, campañas para la tercera edad, disminuidos físicos,
etc

Existen otras instituciones como Amigos de los Animales en Uruguay que no
recogen animales por pedido ni tampoco atienden quejas de maltrato si no están
debidamente documentadas y previamente denunciadas a las autoridades
competentes.

Comentan en su carta de presentación que “damos asesoramiento a
quienes realmente se muestren comprometidos en la defensa de los animales, no
solucionamos problemas de indolentes que no desean ni siquiera tener cargo de
conciencia”.

Esta organización considera que la labor social de las
Sociedades Protectoras de alguna manera contribuye a perpetuar el problema del
abandono.

Distintas filosofías con un fin común, proteger a los animales en situación
de necesidad.

Por Valeria Di Paula

Fuente:
www.uauau.com