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Pobre Luisana Lopilato

Se puede estar o no de acuerdo con mi opinión personal, pero sería interesante que la gente emitiera su parecer.

En el número de setiembre de la revista Miradas, encontré un lapsus considerable que no se me curre a
quen imputárselo: si a la autora de la nota, Catalina DLUGI,
quien pudo estar de acuerdo, al fotógrafo Machado CICALA, quien
abusó de su picardía, o al personal coordinador de producción Néstor
LASKO,
quien no objetó la foto y el texto que le daba doble sentido a
lo que se veía y leía.

                                   Soy
un veterano periodista jubilado – Matrícula Nº 2546, Ley 12.908 -. Fui uno
de los fundadores de APTRA a comienzos de 1960, antes
de
que esta entidad se desquiciara con el finadito FERRADAS
CAMP0S
 a la cabeza.

Comencé como aspirante en 1958, en el
vespertino CORREO DE LA TARDE, junto a periodistas que muchos de los actuales
no les serían útiles para lustrarle los botines.

Por lo
tanto,  de esto creo conocer un montón (de los medios y de la gente
que se devora sin ambages).

                                   Así
las cosas, y después de trabajar en distintos medios del país y de América – escribiendo
y no como charlatán de feria -, en este ostracismo merecido (tengo 68
pirulos) me entretengo analizando a fondo todo el material que cae en mis
manos, especialmente el “chimentero” .

                                   Un
material gráfico que editaron de la joven LUISANA LOPILATO y
una parte de su texto aplicado (a pesar de que hayan sido sus palabras) dejan
mucho
, mucho que desear.


De manera sutil abren esa imaginación más que delicada de los lectores (que para
nada son imbéciles), quienes seguramente no han dejado pasar por
alto lo que puede calificarse como doble intención.

                                   
El tema es gracioso y hasta casi excelente si hubiera tenido cabida en
alguna revista erótica o de sexualidad. Sin embargo y sin alinearme con
los pacatos – no pretendo hablar de censura, sino de mesura con lo que se
muestra y se dice -, el material pudo hacer sido morigerado porque le hacen un
flaco favor a la “¿inocente?” LUISANA.

Primera “gaffe”, sacarla con un
huevo
en la mano, que no tiene nada de malo, pero que si alguna mente
lúcida lo concatena con su dicho de chuparse el dedo
(segunda “gaffe”),  podría interpretarse 
(seguramente muchos lo hicieron) que cuando LUISANA
dejó el habitus digitalis se dedicó a otra cosa,
presuntamente emulando a Mónica LEWINSKY quien
practicaba  saxo con Bill CLINTON y fue lanzada a la
popularidadY fue así que LUISANA ya no
perdió más el tiempo esperando impaciente que la seleccionaran en los
castings.

Siempre, como profesional, me he manejado con la  premisa
que destaco más abajo, la que difícilmente se encontrará en la actualidad
en cualquier medio popular y populachero. Y muchos menos en la
 televisión debido a la proliferación de “periodistas”
mercantilista que, rodeados de “chantas” sin antecedentes
profesionales, practican un periodismo basura de la peor especie. 

Ciertos
reportajes son la medida inexacta… del flujo y reflujo de la marea de la
aspiración humana, de la ignominia de la especie, o de la gloria de la raza
humana; es el mejor sentimiento que poseemos de la bajeza y, paradójicamente, del
magnífico coraje del hombre.


Como periodistas serios sólo debemos
alentar aquello que pueda glorificar, exaltar la honestidad
y destacar la calidad humana (artística, política, económica, social).
Caso contrario, abstenerse… o con continuar siendo periodistas 
basura por el solo hecho de tener la manija.