Usted puede salvar 10 millones de dólares a
su empresa o cerrar un negocio multimillonario que la catapulte al éxito, pero
si su jefe no se entera, es como si nunca hubiese sucedido.
Por lo tanto, usted necesita arreglárselas para que su jefe sepa que está
realizando un excelente trabajo.
¿Cuáles son las prioridades de su jefe? ¿Las
desconoce? Entonces es tiempo de aguzar los sentidos y descubrir qué tipo de
empleador tiene enfrente.
Si su jefe es una persona de números, le conviene cuantificar todos sus
resultados. Y saber qué números son los que más le interesan.
Todas las personas de números tienen sus líneas de preferencia. Si su jefe es de
los que piensan “el cliente es lo primero”, encuadre todos sus resultados en
términos del beneficio a los clientes.
Por lo tanto, si usted se encuentra trabajando en un proyecto imposible de
encuadrar en el rango “cliente/consumidor”, tal vez, debería preguntase por qué
lo está haciendo. Es evidente que ese proyecto no resultará una prioridad para
su jefe. Así que tampoco deberá serlo para usted.
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