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Tenga un guardarropa multiuso

¿Su armario está lleno de ropa y no tiene nada que ponerse? Transforme su armario con unos simples consejos. A continuación, un plan que la ayudará a estar siempre a la moda.

¿Su
armario está lleno de ropa y, sin embargo, no tiene nada que ponerse? ¿Está
cansado de los jeans y las remeras? ¿Necesita un look profesional y no tiene
dinero? Entonces no se mueva de su computadora. Le enseñaremos a confeccionar
un guardarropa versátil y adaptable a todos los estilos de vida.
 

Antes
de comenzar, elija un color tradicional (neutro), al que llamaremos color
“fundacional”,  para construir los cimientos de su nuevo armario. El negro,
el azul marino, o el camel son colores que podría utilizar. Pero lo fundamental
es que usted ame a ese color, y que ese color se combine con el tono de su piel.
Ahora que tiene esto en mente, vayamos de compras…
 

De
paseo por el shopping…
 

En
primer lugar, compre un vestido sencillo, del color fundacional que haya
elegido, hecho en una tela liviana, preferentemente lana o lino, según el clima
en el que viva y su estilo de vida. Acompáñelo con un saco o un sweater que
combine. Si compra un conjunto, asegúrese de poder usar el saco con otras
prendas aparte del vestido. Busque uno que, al menos, le llegue hasta la
cintura.
 

El
vestido no debe ser muy pesado (al menos que así lo desee), pero debe ser del
color que ha elegido, con algunas líneas simples, y que se pueda usar por
varias temporadas. El cinturón, las mangas, el largo, y el escote quedarán a
cargo de su gusto personal. Para los estilos informales, un vestido tejido estará
bien.
 

Luego,
compre un traje de dos piezas, también en su color “fundacional”. Si su intención
es armar un armario profesional, cambie por un vestido también de dos piezas.
Una pollera suelta y una blusa serían apropiadas, como así también una
pollera y una remera hechas a medida que cuando se usen juntas luzcan como un
vestido. Siempre es aconsejable comprar lo que más se ajuste a su personalidad.
La parte de arriba y la da abajo deben ser de la misma tela.
 

Para
un estilo más informal, elija unos pantalones de jersey y una camisa que pueda
usar adentro, o desabrochada y afuera, como una sobrefalda. Cualquiera sea su
elección, podrá usarlo debajo del saco cuando esté usando este vestido básico.
 

Ahora,
su tarea será comprar un traje estampado de dos piezas. En el estampado deberá
predominar su color fundacional, combinado con algunos otros colores que sean de
su agrado. Podrá ser vistoso o apagado, con líneas o motivos florales, según
usted prefiera. Pero elija esta prenda con cuidado y detención, ya que
determinará el tono del resto de su guardarropa. No es necesario que tenga el
mismo corte que el traje anterior, pero sí será necesario que se puedan
combinar ambas partes de arriba con ambas de abajo. En esta caso, también puede
elegir pantalones en lugar de polleras, pero recuerde que ambas piezas deberán
ser de la misma tela. Podrá usar estas piezas juntas así como separadas,
combinadas con el otro conjunto de dos piezas, y con el saco.
 

A
continuación, elija un segundo color fundacional, que deberá formar parte del
estampado. Éste deberá combinar con el anterior, por ejemplo, si antes había
elegido negro, el gris le sentará bien ahora.
 

Haga
más espacio es su bolsa de compras. Agregue un blazer o un sweater tipo cárdigan,
y unos pantalones u otra pollera. Estos artículos deberán verse bien juntos,
pero sin combinar exactamente. Esta vez, será mejor elegir otro tipo de tela.
Estas prendas se podrán usar con el traje estampado y con las otras piezas en
su color favorito.
 

A
continuación, compre dos o tres tops en cualquiera de los colores del
estampado, del estilo y la tela que quiera. Puede ser algo con botones o cuello
de cisne. Tenga en cuenta que su elección deberá combinarse con las prendas
anteriores.
 

Siga
con algunas polleras o pantalones, según necesite. Los colores continúan
determinados por el estampado de su traje. Así, podrá usarlos con cualquier
saco o remera que haya elegido hasta ahora.
 

Hasta
el momento, si ha seguido bien las instrucciones, su armario debe tener un
vestido, un saco o sweater, un traje de dos piezas en su color fundacional, un
traje estampado de dos piezas (cuyos colores determinarán el tono de su
guardarropa), un blazer o un sweater con un pantalón o pollera, y algunos tops
y polleras (o pantalones) que se puedan usar con todo lo anterior. Con esta
selección, tendrá varios cambios de vestuario disponibles, para cualquier
momento y lugar. Combine con accesorios y joyería.
 

El
próximo paso será comprar un par de pantalones que puedan ser utilizados con
una gran variedad de tops, así como con los sacos de sus trajes.
 

En
este sentido, unos pantalones de rayón o lana no pueden faltar en su armario.
Los pantalones negros combinan con todo, desde una blusa hasta una remera.
 

Ahora,
concéntrese en unos pantalones casuales. Busque algo que le sirva tanto para
trabajar como para salir los fines de semana. El algodón es una tela que puede
ser útil en este caso.
 

Las
polleras deben formar parte de su guardarropa. Primero, elija un color neutro.
Intente buscar distintos largos. Una por arriba de las rodillas y otra por los
tobillos estará bien. Así, podrá crear distintos modelos en combinación con
sus prendas anteriores.
 

Por
otra parte, también serán necesarios algunos tops para utilizar con las
polleras, los pantalones, y los jeans. Una camisa blanca será una opción versátil.
 

Ahora
sí, llegó el momento de comprar algunos tops que sean el último grito de la
moda. Pero recuerde que, ya que no van a usarse por mucho tiempo, su inversión
no debe ser desmedida. Busque precios bajos, ofertas y liquidaciones.
 

Elija
algunas camisas que vayan con su personalidad. Tal vez, desee una camisa roja
para usar con un traje beige. O puede que quiera una remera colorida que combine
con su pollera negra. Estas prendas se pueden utilizar en varias combinaciones
y, además, otorgan un look diferente a sus trajes.
 

No
se olvide de añadir algunos suéteres más a su armario. Vienen en diferentes
colores y telas, desde la seda al algodón, y son extremadamente versátiles.
 

Finalmente,
es tiempo de ocuparse de las remaras. Puede comprarlas de rayón, seda, o algodón.
La remera correcta puede enriquecer a su traje o hacerlo más casual.
Representan una excelente manera de agregar color a sus trajes.
 

Con
algo de tiempo y dedicación, usted podrá hacer de 10 o 15 prendas, 25 o más
conjuntos. Sólo tómese su tiempo. Compre con cuidado. Y siempre piense en cómo
encajarán sus nuevas prendas en el conjunto de su guardarropa.
 

Algunas
consideraciones para recordar
 

A
partir de este instante, usted puede elegir otras prendas que combinen con sus
colores, o comenzar todo el proceso otra vez, a partir de un nuevo color. En
cualquier caso, estará feliz con sus colores y estilos de prendas.
 

Cualquiera
puede armar un guardarropa básico, aún con un presupuesto limitado. Comprando
y eligiendo algunas prendas clásicas, usted puede tener un armario todo
terreno, que lo satisfaga ante cualquier necesidad.
 

Lo
primero que debe considerar a la hora de construir su guardarropa será el
color. Elija dos colores básicos alrededor de los cuales se erigirá su
armario. Los colores más versátiles son el negro, marrón, gris, azul marino y
beige. Una vez que haya decidido los colores, puede comenzar a comprar.
 

Generalmente,
es apropiado gastar la mayor parte del dinero en prendas que permanezcan a la
moda, en lugar de prendas marcadas por tendencias de corta duración. De todas formas,
es conveniente que tenga al menos uno o dos conjuntos de calidad. Un traje con
pollera y otro con pantalón serían apropiados; mejor aún en los colores que
ha elegido.

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