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Cuidados que alargan la vida de nuestro perro. Continuación.

¡Cómo ha cambiado la vida de nuestras mascotas! Nuestro mejor amigo ha pasado de ser un trabajador o una mera herramienta en manos del hombre a ocupar por derecho y con todo tipo de honores un importante puesto en la estructura familiar.

 

BASES DE LA SALUD

Hace no muchos años, un perro tenía unas expectativas de vida que no superaban
los 10-12 años; actualmente podemos encontrar en nuestros hogares encantadores
y saludables ancianos que alcanzan una media de entre 15 y 17 años de edad. ¿Cómo
hemos conseguido esto?. Principalmente cumpliendo las siguientes y fundamentales
bases de una buena salud:

1. Higiene: dentro de este marco no sólo se incluye la evidente higiene
exterior de la piel, el pelo, los ojos, las orejas, los dientes…; en este
apartado de higiene, una correcta educación conseguirá que nuestra mascota sea
un ser integrado socialmente y por ello evite desgraciados accidentes, a sí
mismo y al resto de los individuos.

Dentro de la higiene, el juego y el
ejercicio tienen un importante papel; nuestro animal necesita respirar aire
puro, fortalecer sus articulaciones e interaccionar con todos los agentes
externos (tanto saludables como patógenos) que el medio ambiente le propone.

Uno de los mayores problemas que padece un animal en nuestra sociedad es el
sedentarismo, algo que, por cierto, también afecta al propietario y que pueden
evitar en feliz armonía mediante juegos y paseos en el exterior.

2. Alimentación: no nos cansaremos de remarcar la importancia de este
punto como fuente de salud. Si la pauta responsable de aportar energía y
nutrientes a nuestro amigo no es correcta, no podemos esperar que su vida sea
sencilla y sana; lo más probable es que la inadecuada nutrición favorezca a
corto, medio o largo plazo la aparición de patologías.

Disponemos de la más
variada gama de alimentos, en todas las presentaciones y de todas las marcas. Sólo
debemos asesorarnos y seguir "a rajatabla" las recomendaciones del
profesional. Con este sencillo proceder podéis estar seguros de que vuestro
animal vivirá muchos años y con una estupenda calidad de vida.

3. Prevención: todos tenemos grabada en nuestro cerebro una popular
frase: "Más vale prevenir que curar". Grabada, está grabada, pero qué
poco la utilizamos. Un correcto calendario de vacunaciones y desparasitaciones
evitará un gran número de patologías que afectan en muchos casos no sólo al
animal, sino también al resto de la familia.

Pero la prevención no es
solamente vacunar y desparasitar; debemos tener presente la existencia de una
gran variedad de programas preventivos que, coordinados por el profesional ,
conseguirán mejorar aún más el estado sanitario de nuestra mascota.

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Fuente: www.uauau.com