Los espejos constituyen piezas claves en la decoración, porque ofrecen una sensación de continuidad, amplitud y profundidad en los espacios,  dan mayor luminosidad al ambiente,  otorgan a una habitación un estilo muy peculiar y proporcionan una perspectiva diferente de la cual forman parte todos los objetos que en ellos se reflejan. 

Espejos para decorar 

Hay espejos de diferentes formas, modelos  y tamaños: para colgar,  de pie, con una amplia variedad de marcos, discretos, estrechos, en diversas tonalidades… en fin, usted puede encontrar el que más se adapte  a su gusto y  no sólo contribuir con la decoración del ambiente, sino que reforzar su estilo y aprovechar la  función práctica que  éstos cumplen. 

Pero recuerde que los espejos deben ser ubicados en lugares donde no puedan romperse con facilidad, ni representen  un peligro para las personas que están cerca.

A decorar con espejos 

A continuación, algunas recomendaciones a tomar en cuenta a la hora de colocar los espejos en su casa: 

–          La capacidad de crear una sensación de amplitud en una habitación reducida puede llegar a duplicarse si colocas espejos en una de sus paredes, preferiblemente sin marco. 

–          Una forma atractiva de colgar un espejo es dejarlo  levemente inclinado hacia delante;  para que el reflejo dé una imagen más interesante que la que se logra si se coloca totalmente pegado al muro. 

–          No coloque un espejo frente a una pared sin decorar, pues daría una impresión de vacío y frialdad.  

–          Si quiere que un cuadro o espejo colgado de la pared no cambie de posición, envuelva una cinta tipo masking tape en las partes del cordel que quedan pegadas al clavo que está dentro de la pared.  O  coloque dos clavos o enganche en vez de uno, con una distancia de una pulgada entre ambos.  

–          Evite que la pared desconche al clavar en ella:  péguele dos pedacitos de cinta tipo scothc tape en forma de X y coloque en su centro el clavo o garfio.  

–          No olvide que los espejos no deben reflejar el sol, ni proyectar alguna parte de la casa que prefiera tener fuera de la vista de los visitantes. 

–          Para evitar marcar la pared con un lápiz o creyón, utilice un dedo húmedo para señalar el sitio donde va a colocar el espejo.  La mancha de agua se irá en pocos minutos.  

–          Colocar espejos dentro de vitrinas o estanterías hace que los objetos adquieran mayor relieve, y los elementos del interior aparecen en tres dimensiones, efecto que resulta especialmente atractivo, sobre todo, si se trata de figuras pequeñas. 

Por Sarah Pérez Barnes 

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