¡Felicitaciones! Acabas de recibir una oferta de ascenso. Hace tiempo que lo merecías. Pero, ¿sabes lo que esta oportunidad representa?  

Mientras que un ascenso puede representar un estímulo excitante para tu carrera, e incluso una oportunidad económicamente valiosa, también es un nuevo empleo.

Y, como debería ocurrir con cualquier trabajo nuevo que se te ofrezca, es bueno que lo consideres cuidadosamente antes de aceptarlo o desecharlo. Por eso, enplenitud te acerca algunos puntos clave, sobre los que debes reflexionar cuando la posibilidad del ascenso golpee a tu puerta. 

¿El ascenso se adapta a tus planes profesionales?

Éste es uno de los factores más importantes a considerar. Si el ascenso va en la misma dirección que los objetivos de tu carrera, entonces es factible que estés ante una buena oportunidad. A continuación, algunas preguntas adicionales que te ayudarán a pensar: 

• ¿El ascenso te dará la posibilidad de trabajar de lo que realmente deseas? ¿Ya estás feliz y satisfecho con tu actual posición?
• ¿La promoción representa una consolidación de su puesto actual? Si no es así, ¿representa una posibilidad futura de avance y crecimiento?  

¿Tus habilidades sirven para afrontar las nuevas responsabilidades? 

Si puedes, encuentra los requerimientos del nuevo puesto y compáralos con tus actuales capacidades.      

• ¿Existen algunos huecos en de tus capacidades o conocimientos que deberías perfeccionar para poder hacer el nuevo trabajo de manera apropiada?
• ¿Tu empleador te brindará la capacitación necesaria para que puedas desarrollar las aptitudes necesarias para el nuevo puesto?
• ¿Tendrás tiempo para adaptarte y crecer en torno a tus nuevas responsabilidades?
• ¿Tendrás el apoyo y la instrucción necesarias para superar el período de transición?  

¿Los beneficios superan a los desafíos? 

Tómate un tiempo para pesar los beneficios del ascenso en contraposición con los desafíos potenciales. Si tienes una familia, deberás tener en cuenta sus necesidades también. 

• ¿Tendrás el presupuesto y la autoridad para llevar a cabo el trabajo solicitado?
• ¿Tendrás más status y prestigio? ¿Esto es importante para ti?
• ¿Cuánto trabajo extra y responsabilidad deberás asumir? ¿Serán interesantes y desafiantes?
• ¿Tu salario y tus beneficios se incrementarán a consecuencia del ascenso? ¿El aumento en el salario y los beneficios se equiparan con el aumento de las responsabilidades?
• ¿Necesitarás trabajar horas adicionales? Si es así, ¿es algo para lo que estás preparado?
• ¿Deberás cambiar de lugar geográfico de residencia? En caso afirmativo, ¿qué gastos cubrirá la compañía?
• ¿Será más largo el viaje de tu casa al trabajo? Si es así, ¿esto representa un problema?
• ¿Tu vida personal es lo suficientemente estable como para aceptar nuevos desafíos en lo laboral?
• ¿Por qué tu antecesor dejó el puesto? ¿Puedes hablar con esa persona para averiguar los puntos positivos y negativos del puesto?
• ¿El ascenso fue ofrecido a otros que lo rechazaron? En caso afirmativo, ¿puedes descubrir por qué?  

A menudo, un ascenso se traduce en el movimiento hacia una posición de supervisión o de gerencia. Las preguntas a continuación te ayudarán a descubrir si te sentirás a gusto con este aspecto de tu nuevo puesto. 

• ¿Crees que tu equipo de recursos humanos tiene las cualidades necesarias para el trabajo?
• ¿Deseas cambiar tu posición de compañero de trabajo/amigo a una posición de autoridad?

·         ¿Disfrutas las tareas administrativas o prefieres involucrarte personalmente en los proyectos? 

¿Todavía tienes dudas? 

Si todavía te sientes inseguro, considera peticionar un período de prueba, con una fecha definida de comienzo y final, para chequear el ascenso y ver si es apropiado para ti. Prepara los arreglos necesarios para que alguien cubra tu actual posición mientras pasas tu período de prueba. 

¡Sí, quiero! 

Si tu respuesta a la propuesta de ascenso es un resonante sí, deja que tu jefe se entere. Asimismo, pregunta cualquier cosa en relación con los términos y condiciones que pudieran no estar claros.

No olvides en dejar sentado, por escrito, cualquier compromiso que la empresa adquiera para contigo; por ejemplo, planes de capacitación. Después, celebra el ascenso de un nuevo peldaño en la montaña de tu carrera profesional. 

Rechazar el ofrecimiento 

Si decides desechar el ascenso, hazle saber a tu jefe lo valioso de que permanezcas en tu actual puesto. Describe las capacidades, cualidades y comportamientos que te hacen particularmente apropiado para tu actual posición, tal y como si estuvieras en una entrevista laboral.   

Por otra parte, asegúrate de dejar en claro que, aunque no hayas aceptado el ascenso, no le temes a los cambios y estás deseoso de asumir nuevos proyectos. En ese sentido, subraya lo importante que es el crecimiento personal para ti y destaca que quieres realizar algún tipo de entrenamiento o participar de proyectos adicionales, en vistas de expandir tus conocimientos y aptitudes. 

Pasa algún tiempo meditando sobre tus objetivos profesionales, tus preferencias y aptitudes antes de aceptar o descartar una promoción. La decisión correcta resultará beneficiosa, tanto para tu jefe como para ti. 

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