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¡Qué suerte!

Los recuerdos se almacenan en el cerebro humano y por alguna circunstancia, ya sea el estado de ánimo o algún hecho reciente, inesperadamente salta uno de ellos y nos pone a pensar en él. Tal es el caso que les voy a relatar…

Resulta que en cierta ocasión mi mujer tuvo que salir de la ciudad con el fin de visitar a nuestra hija, como es obvio me quede sólo y mi alma en casa, la primera noche se me hizo muy pesada, recuerdo que dormí un rato y desperté por que estirando el brazo para abrazar a mi compañera, me fui en banda y agarré las cobijas así que jalé la almohada , la puse junto a mi y a dormir se ha dicho.

Al despertar y levantarme de la cama chin… meto mi pie en una cacerola con agua situada junto a la cama, no me acordé que durante la noche llovió y yo mismo coloqué la vasija para recoger una gotera del techo, creo que desperté con el pie izquierdo, aunque el que metí fue el derecho, me dirigí a la sala y encendí la Tele.

Estaba pasando un programa de una astróloga o pitonisa, la que recomendaba limpias y baños con yerbas y no se que otros menjurjes más para quitar las malas vibras, como no soy muy afecto a eso me fui a la cocina a calentarme un cafecito y al encender la estufa me doy cuenta que no había gas.

Encabronado me volteo dando una patada al aire con tan mala fortuna que doy con mi pie en una silla, ahí me tienen gritando y a la pata coja huy,huy,huy como el ave aquel que tenía los "esos" tan grandes que cada vez que aterrizaba se los lastimaba emitiendo el sonido de huy, huy, huy, de ahi su nombre de "pájaro huyuyuy".

Tomé un pedazo de hielo, lo envolví en un trapo y lo froté sobre mi pobre dedo gordo casi hinchado y amoratado, se me vino a la memoria la santera aquella de la televisión pero deseché dicho pensamiento.

Decidí salir a la cafetería pero en ese momento veo a un tipo con toda la cara del Chuky de la película de espanto parado en la esquina, cierro la puerta y lo observo por la ventana.

De pronto el individuo aquel se dirige a mi casa, ahí me tienen temblando como flan agitado, toca a mi puerta y ya saben lo que es el subconsciente, le digo, casi le grito, __¡No hay nadie!__y me responde __¿Entonces quien es usted? me quedé hecho un "dejo" sin saber que contestar y casi en balbuceos le pregunto ¿Que desea?__regáleme un peso para completar para mi café__le dí dos pesos para que se largara.

Ya calmado que salgo y al ir por la banqueta veo una escalera que interceptaba mi paso y ya escamado que la rodeo, casi me arrolla un automóvil y el chofer me gritó ¡órale guey! me le quedé mirando y sólo levanté mi mano enseñándole el dedo mayor hacia arriba.

Seguí caminando cuando veo a uno de esos acomodadores de autos callejeros haciéndome señas con la franela, me dije, este baboso ya me vio cara de coche, pero no, me hacia señas para indicarme que iba a entrar un carro, me sonreí resignado con mi suerte y seguí mi camino.

Más adelante veo en la calle unas lagunas formadas por los baches cuando siento el baño de esas aguas causadas por un chofer sin conciencia que como diría Adal Ramones conductor de Televisa (hijo e sú) que no se si lo hizo a propósito, por cabrón o por instinto, lo cierto es que me escurría agua hasta por "detroy ".

Ya en el centro, parado en una esquina aguardando un camión de pasaje, pasó un gato negro enfrente y a mis pies y doy el salto hacia atrás con tan mala suerte que piso a una mujer gorda de muy malos bigotes y peor genio que rauda y veloz me atiza tremendo bolsazo y me grita "endejo".

Ya era mucho así que decidí ir con la bruja, curandera o como se llame, me recibió muy amble y comenzó dándome de yerbazos por todo el cuerpo después tomó un huevo y me lo froto, desafortunadamente que se rompe cuando tallaba mi brazo, lo bueno fue que los otros dos quedaron intactos (me refiero a los productos de gallina no sean mal pensados).

Ella hizo el comentario de que estaba muy negativo, pensé, como cuernos no, con todo lo que me había pasado, terminó de limpiarme y salí todo apestoso a huevo y a yerba y con $50.00 menos en mi bolsillo pero eso si, mas optimista.

Seguí mi rumbo y veo una cartera en el suelo, pensé, cambió mi suerte, volteé mi cara de un lado a otro, nadie me veía, me incliné a recoger el regalo que el cielo me ofrecía, casi estaba en mis manos, cuando de repente la cartera cobró vida y salto por los aires cual si fuera una rana, a consecuencia de un hilo atado a ella, en ese momento escuche el tamborileo de latas y gritos de, "Inocente palomita que te haz dejado engañar", no recordaba que era el 28 de diciembre, día que se celebran los Santos Inocentes y que muchos desocupados lo agarran para ""ingar a endejos"" despistados.

Todo apenejado me regresé a mi casa y ya más tranquilo y seguro pensé, aquí ya no pasa nada, así que encendí mi aparato de televisión para ver el noticiero y que creen, lo primero que veo en la pantalla es a un endejo volteando para todos lados con cara de yo no fui para luego inclinarse a tratar de recoger una cartera.

¡Pa suerte la mía!

Glosario:

Endejo…………………….tonto, burro, imbecil, endejo con P

Dejo………………………..apócope de endejo.

Guey………………………..tonto, baboso, sanchado, burlado.

Hijo e sú…………………..hijo de su madre (de nadie más)

Ingar……………………….fregar , molestar, incomodar

Apenejado………………apenado, avergonzado, atontado..

Carajo…………………….caramba, barril de vigia de un barco.

Chin………………………..expresión de zas, pas, por accidentes….

Encabronado…………..enojado enfadado….

Cabrón——————molesto, que incomoda, fregón

Detroy…………………….por atrás, por la espalda, por las nalgas

Autor. Remolón

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