Share on facebook
Share on twitter
Share on whatsapp

Genealogía judía: origen de los apellidos sefardíes

¿Eres de ascendencia sefaradí? ¿quieres saber el origen de tu apellido? Entonces, esta nota es para ti…


Apellidos
sefardíes

 

Podemos
encontrar aquí otra diferencia clara entre los apellidos sefardíes y los
askenazis, refiriéndonos a la cantidad de años que han pasado comúnmente desde
que los diferentes apellidos han sido adoptados.

 

Para
empezar, digamos que entre los askenazis la mayor parte de los apellidos han
sido adoptados hace un tiempo relativamente (y es que siempre son relativos
estos tiempos) reciente. Por otro lado, los apellidos de los sefardíes en
general fueron adoptados en los siglos doce o trece (y algunos aun un tiempo
antes), con lo cual podemos notar la diferencia de historia sobre sus espaldas
que unos y otros tienen.

 

Muchas
familias askezanis reciben su nombre bastante más tarde, como ya dijimos, con
mayor precisión en el siglo diecinueve.

 

¿A qué se
debe esto? A que en el siglo diecinueve se promovieron en diferentes partes de
Europa una serie de leyes que apuntaban a facilitar las tareas del gobierno, en
especial en lo que concernía a la recolección de los impuestos, así también como
al censo y control de los habitantes.

 

Esto no
solo ocasion
ó toda una serie de familias con nombres
nuevos y, como dijimos, relativamente recientes, sino también que hubiese muchas
personas sin relación familiar entre sí que terminaran compartiendo un apellido,
ya que simplemente terminaron adoptando el mismo apellido cuando llego el
momento de seleccionar (o serles asignados) aquel con que deberían seguir sus
vidas.

 

Por otro
lado, el hecho de que los nombres sefardíes tengan una historia mucho más larga
y que hayan permanecido inalterados durante mucho más tiempo (al menos en una
buena parte de los casos) permite que tengan un uso distinto en para ellos.

 

En
la tradición sefardí, el nombre de familia identifica a la persona como el
descendiente de un tronco especifico, de una familia especifica y reconocida.
Como podemos ver, esto no puede ser posible en el caso de todas aquellas
familias askenazis que comparten nombre por una cuestión puramente burocrática.

 

Por todo
esto, cuando se trata de hacer un estudio genealógico de una familia en
particular, no tienen todos los datos la misma importancia. Y cuales son más
importantes también dependerán en gran parte (o totalmente) de cual es la rama
que estamos estudiando. No es lo mismo para un sefardí que para un askenazi.

 

En el caso
de la investigación sobre los askenazi lo más importante muchas veces es la
localización geográfica, el nombre exacto de shtetl tiene una importancia casi
superlativa, que muchas veces es incluso mayor que el del nombre de la familia,
ya que suele poder seguírselo a través de una mayor cantidad de años, sin caer
en esa especie de agujero negro que puede llegar a ser el siglo diecinueve.

 

Por otro
lado, el caso de los sefardíes, es todo lo opuesto. El nombre de la familia es
el dato más importante que se puede tener, mientras que la localidad y el shtetl
pierden totalmente frente a este.

 

Esto se
debe en gran parte a que, históricamente, los sefardíes son prácticamente
nómades, viajando constantemente, yendo de un lado al otro y trasladándose de un
lado a otro extensivamente.

 

Esto hace
que el dato geográfico se vuelva obsoleto muy rápidamente. Pero el apellido es
algo que no se cambia, a lo que las familias se aferran constantemente y en todo
lugar y no cambiarán por nada, así que es mucho más fácil de seguir a través del
tiempo, más aun considerando su origen en general bastante antiguo. También
tienden a conservar su genealogía, lo cual facilita mucho el estudio.

 

Origen de
los nombre
s sefaradíes

 

Los
apellidos sefardíes tienen mucho orígenes distintos, pero la mayor parte de
ellos pueden ser fácilmente reconocidos prestando tan solo un poco de atención a
los apellidos.

Toledano: Que proviene de Toledo.
Alfasí:
Que proviene de Fez
Mizrahi:
Proveniente del Este
Levanti:
Proveniente del este, también conocido como Levante

 

Estos
apellidos son fáciles de entender, y con tan solo unos pocos ejemplos
comprendemos claramente cual es el sistema al que estamos haciendo referencia.
Como estos, podemos encontrar muchísimos más. Hay otros apellidos que denotan un
pasado ilustre.

 


Prefijos y Sufijos

 

Los
prefijos son un tipo
de afijo que precede a los
morfemas a los que están unidos. El sufijo tiene la misma función, pero se une
al morfema al final del mismo, no en su comienzo. Son muy interesantes para
analizarlos un poco, en relación con los apellidos.

 

Es muy
común en la mayor parte de las culturas encontrar patronímicos cuyo significado
es “hijo de”. En casi todos los lugares del mundo vamos a poder encontrarlos.
Esto se puede encontrar en los askenazi con las terminaciones “ovich” y “sky”.
Un par de ejemplos de esto serían los apellidos como Abrahamovic (hijo de
Abraham) y Abramsky (hijo de Abram).

 

También
entre los sefardíes podemos encontrar una cuantas formas comunes de “hijo de”.
En el hebreo podemos encontrar la forma Ben. En Arabe, la forma Ibn y en arameo
la forma Bar.

 

Ejemplos de esto son Ben Malka, Ibn Malka, Ibn Shaprut, Malka Bar
Aha y otros. En todos los casos podemos ver como aparece la forma que determina
el “hijo de”.

También podemos encontrar una forma que significa “padre de”, aunque es un poco
menos común. Ejemplos de esto son Abi, en hebreo; y Abu en árabe, como podemos
ver en los nombres Abishera y Abudarham.