Share on facebook
Share on twitter
Share on whatsapp

De viaje con niños pequeños

Viajar en familia es lo mejor… pero si lo haces con bebés o niños pequeños, ten en cuenta estos consejos sobre su alimentación

El
bebé, un capitulo aparte


En primer lugar, debe saber que no existen
muchas dificultades para alimentar a los bebés en los viajes largos, y de hecho
la lactancia mamaria es la manera más natural de hacerlo. Por eso, si ha
estoado considerando destetar a su bebé, pospóngalo hasta después de su
viaje, pensando en todas las bolsas, botellas y contenedores de los que no tendrá
que hacerse cargo en esos momentos.

Sólo tenga presente que aquí se aplican,
para usted, las mismas reglas de cuidado personal que se aplican que en su casa,
es decir beber una cantidad abundante de líquidos, comer suficientes alimentos
para compensar la cantidad requerida de calorías, y sobre todo, llevar una
alimentación sana para mantener alto su nivel de energía.

El acto de amamantar debe ser relajado y cómodo,
por lo que usted no necesita ocultarse en un sucio baño público cuando le de
el pecho a su bebé. Sin embargo, si encuentra que se siente incómoda haciéndolo
en público, trate de encontrar un lugar privado para usted misma y para su bebé.

Tenga en cuenta que el bebé absorberá su
tensión si usted no está cómoda y no lo amamanta bien. Intente amamantarlo en
lugares que no sean demasiado ruidosos ni ventosos, pues esto también puede
perturbar al bebé.

Cuándo amamante en público, ponga un
chal o frazada sobre la cabeza del bebé, y use, usted misma, ropa especial para
amamantar, con aberturas ocultas o llevando algo flojo que se pueda levantar por
arriba de la cintura. Elija camisas abotonadas y sostenes que se puedan correr
sin necesidad de desenganchar el bretel. Si su bebé está cómodo en una
mochila portadora de frente, aprenda cómo amamantarlo dentro del portador.

Si su bebé es alimentado mediante
mamadera, lleve mucha agua esterilizada, leche en polvo o larga vida, hervida,
en botellas esterilizadas, un termo de boca ancha con agua caliente para
calentar y limpiar, y un esterilizador de botellas. También podría llevar
botellas que se calienten enchufándolas en los tomas de los encendedores del
auto.

Hasta que el bebé tenga más de un año y
medio, siempre es bueno llevar también una caja de cereales instantáneos para
bebés, que se pueden servir sólo agregándoles agua purificada, y volverse una
comida muy aceptable para combinar con fruta fresca pelada, en donde sea y en
cualquier momento.

El cereal instantáneo para bebés puede
ser, también, previamente mezclado con leche en polvo y guardado en pequeños
contenedores plásticos o bolsas plásticas con cierre, para tener una comida
instantánea, que solo deba ser mezclada con un poco de agua tibia.

Concurra antes de partir a tiendas
especializadas en bebés para averiguar que tipos de de platos, vasos, y
cubiertos especiales podría comprar para su bebe. Existen dispositivos que
permiten alimentar con cereales u otros alimentos espesos, con la misma
comodidad con la que utilizaría una mamadera, y se pueden conseguir en muchas
tiendas especializadas.

 No se olvide tampoco de llevar todos
estos utensilios a los restaurantes, pues tranquilamente podría compartir con
su bebé la comida que allí le sirven. Eso si, nunca le sirva comidas ni leches
sazonadas con sobras de comidas previas, pues podría tener bacterias
perjudiciales.

Los
bocados, la clave para una barriguita feliz


Para los más pequeñines, las comidas que
se pueden comer en bocados a través de todo el día, son una gran forma de
mantenerlos felices, pues los chicos pueden comer mejor cuando pueden tomar un
bocado frecuentemente, es decir a través de todo el día.

En efecto, como padre, sabe que ellos no
siempre comen cuando es el momento y los horarios de hacerlo, sino que sólo lo
harán cuando tengan hambre. Por lo tanto, no habría que preocuparse si un
chico de menos de cinco años deja de comer cuando se para en un restaurante.
Simplemente, manténgales un suministro de una variedad de sanos alimentos y
bebidas, que se puedan tomar o comer en bocados a través del día, y se ahorrará
muchos problemas.

Este tipo de bocados para el camino,
incluyen desde pedazos de queso y fetas de queso de máquina, hasta bananas,
otras frutas, galletitas, maníes, y barras de cereal sin azúcar. Un sándwich
de galletas con queso o fiambre, es un bocado fácil de preparar en el viaje, y
sin dudas muy sabroso para sus hijos.

La
importancia de la prevención


Cuando viaje a países muy alejados,
preste una atención extra al aspecto sanitario de la comida, lo cual podría
evitarle muchos problemas intestinales. Además, tenga en cuenta los siguientes
puntos:

1. Asegúrese de comprar productos
“larga vida”, que suelen ser de la mejor calidad.

2. Compre leche fresca sólo si la misma
está pasteurizada y vendida en saches sellados.

3. Siempre pele todas las frutas.

4. Coma comidas que sólo hayan sido muy
recientemente preparadas, y servidas calientes.

5. No tenga vergüenza de pedir entrar a
la cocina y escoger su cena (ponga como excusa que no conoce el menú
extranjero, por lo que desea verlo) viendo el contenido de las diferentes ollas,
y señalando las ollas que se vean más sanas y apetitosas.

6. Siempre lávese las manos antes de
comer, y haga lo mismo con las de sus hijos.

7. Aunque no es recomendable consumir
gaseosas, la Coca Cola es muy popular para las indisposiciones de estómago, y
además se embotella según estrictas condiciones sanitarias mundiales.