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La sexualidad en el climaterio

Cómo afrontar los cambios durante el climaterio y transformarlos en nuevas posibilidades de realización personal

El primer paso para vivirse sanamente
es aceptarnos en cada etapa
de nuestra vida  con amor.

Nu Bleu I de Henry Matisse

¿Qué es el climaterio?

Climaterio se deriva de "klimakter" significa “peldaño, escalón  en la vida de una persona, momento difícil de superar”.

Crisis vital evolutiva en la vida de la mujer..  procesos corporales, emocionales, que coinciden habitualmente con la menopausia  o aparece a continuación de la misma.

Esta crisis vital transcurrirá para cada mujer de acuerdo con sus valoraciones culturales, su historia familiar, su formación educativa, religión, moral y ética.

Crisis que resolverá cada una, de acuerdo con su historia personal y el entorno social que la rodee y contenga en ese momento.

¿Qué le sucede a la mujer en climaterio?

¿Cómo se puede enfrentar para que no se convierta en una carga?

Para saber quienes somos
debemos saber por lo menos qué sentimos

Cada uno de los síntomas con los que nos encontramos ( recordemos que no siempre aparecen de la misma manera y en todas las mujeres ) pueden ser interpretados como distintas formas de expresar corporalmente la conflictiva que acompaña al climaterio.

Podremos encontrarnos con: sofocaciones, palpitaciones, irritabilidad, aumento de peso, sentimientos de desgano, ansiedad, hipersensibilidad, dificultad para dormir, dolores de cabeza, inestabilidad emocional, disminución del apetito sexual (libido).

Frente al Espejo: climaterio y cambios en la imagen corporal

Los cambios en la imagen corporal a cualquier edad siempre afectan positiva o negativamente y provocan ansiedad.

No hay aspecto humano en donde el cuerpo no sea puesto en juego.
Con el vivimos, con él sentimos, con él amamos y con el sufrimos.
¡Somos nuestro cuerpo !

Nuestro cuerpo se encargará de hablar por nosotros. Cuando una persona se ve a sí misma de modo negativo su autoestima se ve disminuida.

Para ella su yo negativo es el real, el auténtico, y su modo de vida se ve influido por esa imagen desvalorizada que percibe de sí.

La presencia del climaterio y, por tanto, el cese de la función reproductiva y el cambio en la imagen corporal, puede provocar en algunas de nosotras, mujeres “cierta resignación” acompañando  la idea de que ya no es indispensable, de no saber qué hacer en el tiempo libre con el que antes no contaba, el sentimiento de que ha dejado de ser atractiva sexualmente, y hasta puede negarse a la relación sexual por no tener ya “razón de ser”.   

Nunca dudes de la sabiduría de tu cuerpo, la mente puede engañarte, pero cuando el cuerpo habla, siempre lo hace desde la verdad, ya que posee sensores que nuestro raciocinio no puede entender, así que aprende a reconocer las señales de empatía o antipatía, de alerta o de paz, que te envía constantemente.

¿Cómo? Observándote, sintiéndote.

La Sexualidad en el climaterio

¿Cómo afrontar ese cambio: en búsqueda de  nuevas posibilidades de realización personal

La intimidad consiste en optar por estar conectados, en cada momento, con nuestra verdad más profunda, en vez de aislarnos de ella.

Nos contactamos con una etapa de nuestras vidas en la cual dejamos de tener la posibilidad de procrear.

A partir de esos momentos, la sexualidad quedará, a todas luces, solamente regida por la búsqueda del placer.

El deseo y satisfacción sexual estarán influidos por las circunstancias de vida, la calidad de nuestras relaciones sexuales, la salud emocional y física, aunado a los valores y pensamientos con respecto a la sexualidad, así como por los cambiantes niveles de hormonas que se producen durante esta transición.

El Climaterio se acompaña de cambios en la nuestra femenina sexualidad.

“Mi  cuerpo ya no es el mismo” “No responde de la misma forma durante la actividad sexual”.

Esta etapa exige a cada una (y consecuentemente a nuestro psiquismo), contactarnos con nuestros recursos adaptativos que nos permita transitar de la forma menos dolorosa posible.

Solas o con asesoramiento profesional, debemos abocarnos a una tarea compleja de contacto con nuestra interioridad, con nuestra historia, el aceptar pérdidas, elaborar duelos, hacer propios logros personales y encontrarnos  con aspectos creativos.

El recuperarnos como seres humanos con nuestras diversas condiciones eróticas nos hace más humanos, nos dignifica y nos hace recuperar  el cuerpo que habitamos, el cuál a veces pareciera ser solo una parte de nosotras.

¿Cuáles serian entonces los objetivos de una terapia analítica, psicoterapia de apoyo?

Podemos cambiar el nombre muchas veces, pero la idea fundamental es ayudar a accionar un cambio posibilitarnos una visión diferente de nosotras mismas y de lo que sentimos frente a ello.

¿Qué me significa ser Mujer?
¿Cómo debe ser el cuerpo físico de una mujer?,
¿De que manera vivo mi sexualidad?,
¿Qué pilares sostienen mi vida?,
¿Qué tanto me permito equivocarme y que hago conmigo cuando me equivoco?
¿Como es mi relación con lo Masculino?,
¿Qué hago con mi ira?
¿Qué hago con mi vergüenza?
¿Cómo vivo mi soledad?
¿De qué alimento mi espíritu?

Desde lo corporal, emocional o social, aceptar el cambio del cuerpo y permitir el paso a esta nueva imagen corporal.

Abrir el camino a las emociones y poder desplegarlas para entender el origen de estas angustias y/o ansiedades, así como temores o inhibiciones.

Replantear y reacomodar la sexualidad y los vínculos. Permitir el despliegue de las fantasías para ingresar en una etapa más creativa y de mayor integración con “el yo mismo”.

El replanteo de las emociones puede servir a la mujer madura para dar a su vida afectiva un carácter más sereno, libre de ambivalencias y conflictos emotivos.

En otras palabras permitirse a si mismas "ser un poco más felices como mujeres".

Y Dios me hizo mujer

.Y Dios me hizo mujer,
de pelo largo, ojos, nariz y boca de mujer.

Con curvas y pliegues
y suaves hondonadas
y me cavó por dentro,
me hizo un taller de seres humanos.

Tejió delicadamente mis nervios
y balanceó con cuidado
el número de mis hormonas.

Compuso mi sangre
y me inyectó con ella
para que irrigara todo mi cuerpo;
nacieron así las ideas,
los sueños, el instinto.

Todo lo creó suavemente
a martillazos de soplidos
y taladrazos de amor,
las mil y una cosas que me hacen mujer todos los días
por las que me levanto orgullosa todas las mañanas
y bendigo mi sexo.

Gioconda Belli

Por Lic. Rocio Gozurreta Banzas
Psicóloga

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