Share on facebook
Share on twitter
Share on whatsapp

El origen del árbol de navidad

Conoce el origen del árbol de Navidad, y recibe un arbolito para el alma

Hay varias leyendas
germánicas en que se fundamenta la práctica de introducir en las casas el
Árbol de Navidad
convirtiéndolo en el eje en torno al que giran estas
fiestas.

Aunque muchas
personas creen que el árbol de navidad es de origen romano, la verdad es que
vino de mucho más lejos.

La versión cristiana, en
cuanto a sus adornos, tiene su referente mítico en el Árbol de la Vida,
que era portador de todos los frutos que el hombre pudiera apetecer; incluido el
más preciado, el de la inmortalidad. El día del Nacimiento de Dios, es
decir el día de Navidad gozan todos del privilegio único de ver
satisfechos sus deseos acariciados durante todo el año, ofrecidos como fruto por
el Árbol de Navidad. Es el momento de resarcirse de la austeridad que
impone la vida el resto del año.

Con el correr de los años, el árbol de Navidad, como símbolo del nacimiento del
Señor, pasara también al orbe católico, y desde hace ya mucho tiempo, en la
Plaza de San Pedro en Roma, junto al Pesebre se alza un enorme abeto decorado
profusamente que es regalado todos los años al Papa por diversas comunidades
católicas de los países centroeuropeos.


Sea cual sea la historia, para cada uno de nosotros significa algo diferente
pero muy hermoso.

Comparto contigo esta poesía
que me llegó por el Internet.

ÁRBOL DE
NAVIDAD

YO
QUIERO

EN ESTA
NAVIDAD

PODER
ARMAR UN ÁRBOL

DENTRO
DE MI CORAZÓN

Y EN ÉL
COLGAR, EN LUGAR DE REGALOS,

LOS
NOMBRES DE MIS AMIGOS

LOS QUE
VIVEN LEJOS Y LOS QUE VIVEN CERCA

LOS
ANTIGUOS Y LOS MÁS RECIENTES

LOS QUE
VEO TODOS LOS DÍAS Y LOS QUE RARA VEZ VEO,

LOS QUE
SIEMPRE RECUERDO Y LOS QUE A VECES OLVIDO,

LOS DE
LAS HORAS DIFÍCILES Y LOS DE LAS HORAS ALEGRES,

LOS QUE
SIN QUERER HERÍ Y LOS QUE SIN QUERER ME HIRIERON


AQUELLOS QUE CONOZCO PROFUNDAMENTE Y AQUELLOS QUE

CONOZCO
SUPERFICIALMENTE,

LOS QUE
ME RECUERDAN Y LOS QUE RECUERDO,

MIS
AMIGOS HUMILDES Y MIS AMIGOS IMPORTANTES,

LOS QUE
ME ENSEÑARON Y LOS QUE SE DEJARON ENSEÑAR POR MÍ,

UN
ÁRBOL DE RAÍCES MUY PROFUNDAS PARA QUE SUS NOMBRES

NUNCA
SEAN ARRANCADOS DE MI CORAZÓN.

UN
ÁRBOL DE RAMAS MUY LARGAS PARA QUE LOS NOMBRES LLEGADOS DE

TODAS
PARTES, VENGAN A JUNTARSE A LOS EXISTENTES.

UN
ÁRBOL

DE
SOMBRA MUY


AGRADABLE PARA

QUE
NUESTRA

AMISTAD
SEA UN

MOMENTO
DE

REPOSO
EN LA

LUCHA
DE LA VIDA.

QUE EL
ESPÍRITU DE NAVIDAD HAGA DE CADA ALA UNA FLOR,

DE CADA LÁGRIMA UNA SONRISA, DEL RENCOR LA SABIDURÍA
Y DE CADA CORAZÓN UNA CASA LISTA PARA RECIBIR A TODO