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Cómo ganar espacio en el cuarto de sus hijos adolescentes

El cuarto de los hijos es un ámbito que merece especial atención. Sí los suyos son adolescentes, estas sugerencias le servirán para construirles un refugio a su medida

Lo primero a tener en cuenta es la necesidad de otorgar funcionalidad y aprovechar el espacio –sin que una afecte negativamente a la otra-  tanto de las paredes como del piso, el cielorraso y el equipamiento.

Esto puede lograrse -como elemento básico del diseño que definirá todo el espacio en su conjunto- recostando el equipamiento sobre dos paredes, formando una “L”.

En segundo lugar -si el espacio disponible no es grande y la habitación es compartida- es una buena opción distribuir el espacio en dos niveles: uno inferior, para desarrollar las actividades de estudio y esparcimiento, y otro superior para dormir (con camas marineras).

Para aprovechar más aún el espacio, y “matar dos pájaros de un tiro”, puede disponerse en los laterales de los camas una hilera de cajones dispuestos en forma vertical y pintados en tonos que rompan la monotonía y den claridad y sensación de espacio. Estos cajones pueden servir también como práctica escalerilla con el simple agregado de barrotes de madera.

En el nivel inferior, se puede disponer una mesa amplia –lo suficiente como para proveer espacio de estudio y para una computadora- que se continúe con otro grupo de cajones.

Por su parte, un sector de estantes servirá para dar cabida a libros, revistas y todo lo que pertenece a los jóvenes adolescentes. Todo esto se emplaza en el fondo de la habitación. El equipamiento de la zona de adelante puede tener características parecidas al anterior. Al lugar de dormir se sube por el costado.

Por la costumbre adolescente de realizar varias cosas al mismo tiempo, es buena idea equipar la habitación con sillas para escritorio (giratorias, con ruedas, y de altura ajustable).

Los espacios libres de las paredes, y el plano inferior de las camas, pueden con corcho o material sintético poroso, en planchas, con la expresa finalidad de pegar con chinches láminas, banderines, posters, recordatorios y todo lo que acostumbran los adolescentes colocar en las paredes.

En cuanto a la iluminación, lo mejor es que sea individual y directa por sectores, con un aplique contiguo a la puerta que brinde la cuota de luz general.

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