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ISA
> Por: CIDCAMPEADOR > 17:03 Hs, Jueves, 21 de Junio 2007 |
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En realidad, hombres y mujeres tenemos desde distintas percepciones, hasta distintos comportamientos ante el amor. Ambos podemos amar con igual intensidad, pero lo que estamos procesando en nuestros chips, y lo que estamos transmitiendo hacia afuera, a veces no es lo mismo. Es obvio que la masculinidad y la femineidad son diferentes, y eso por supuesto que marca muchos de nuestros comportamientos sociales y de pareja.
Otro factor que definitivamente influye es el cultural. Cómo te educaron desde niño, qué ejemplos y qué ambiente viste en tu casa o entre tus parientes, y también, evidentemente, tu cultura regional. Es claro que hay regiones donde las relaciones de pareja son absolutamente distintas a otras: mayor o menor machismo, mayor o menor apertura, mayor o menor liberalidad, más o menos derechos de las mujeres, etc.
Dentro de la propia Latinoamérica se da eso. En general lo que el hombre espera del amor de su mujer es que ésta lo atienda, y lo que la mujer espera del amor del hombre es que éste la proteja. Y así, a la inversa, cada uno le expresa su amor al otro.
A partir de esa base cultural original, con más o menos variantes, diferencias, evoluciones, influencias de inmigrantes, etc., puedes encontrar un abanico de posibilidades en todos nuestros países.
Efectivamente como tú dices, yo he conocido casos de hombres que son unos verdaderos monigotes en manos de sus mujeres, y también mujeres que son unas especies de geishas con sus maridos. Hay algunas historias entretenidas pero algo largas de contar.
Mañana espero hacer salmón al horno, relleno con champiñones y espinacas salteados, acompañado con papas gratinadas y ensalada toscana, que es muy colorida y da un muy buen aspecto al plato. Eso, rodeado de unas salpicaduras de salsa de vino tinto. Y acompañado de un buen Chardonnay frío.
Ya se me hace agua la boca
Un abrazo
Patricio |
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