Las mujeres de este grupo (ya no lo llamaré más foro) están logrando cosas magníficas y asombrosas.
Primero, NANCY, nuestra mariposa de frágiles alitas, desata el Gran Encuentro Latinoamericano a partir de la sorpresa y los derroches de amor causados por su historia secreta.
Lugo, KARI, nuestra sufriente amiga de frágil espalda, pero de alma indomable y resuelta y de corazón alegre, provoca esta oración común que haremos el domingo, cada uno a su manera.
¡DIOS, SÍ, EXISTES! Gracias por habernos juntado.
El Cid
|