hola
> Por: NEGRODEREK
> 14:39 Hs, Viernes, 4 de Mayo 2007
Ahora yo ceo que me entienden los que me dan la molienda con que me voltié a a la rubia. Creo que ahroa experimetnan sin conocerla como esa rubia puede comnenzar causando suspiros y termina propiciadno buenas intensiones. Cuando yo la conocí (a proposito de amores platóncos) lo primero que dije fué ¡chico, que hembra tan hermosa!. Sabia que estba lesionada porque nosotros le damos los medicamentos que NUNCA se toma. Pero me llamaba la atencion que caminara con gracia, que nunca dejara de estar riendo, chacoteando (bromeando) y estuviera al 110% con los pacietnes encima de su dolor. Luego me tocó ir a un congreso en el que ella puso un tema muy bonito con un título que tomó de Gabriel García Márquez y así constó en los programas "Morir es no estar nunca mas con los amigos". Entoces ya no dije ¡chico que hembra! me cambió por la admiración a su persona, al canto a la vida que dice mi poema. Luego el año pasado vinieron cuatro cirugías. Cuarto en un solo año y las quimioterapias y hemodialisis para descansar los riñones que se saturaban, infiltraciones en la columna comn cortisona. Hicimso una carnicería con su espalda y Fernanda es testigo de que nunca pierde el ánimo ni el humor ni la fe. Yo viví sus mometnos de gloria como ciclista, la vi llegar a la meta en las nacionales y festejar un priemer lugar para luego verla al mes en el quirófano, que era mucho pa' mi pues. Asi empezó el cariño mas filial que le he tenido a una mujer. Cuadno queriendo consolarla yo era el mas consolado. Es de verdad mi hermana adoptiva. Espero que flor me entiedna y la acepte como su cuñada. TANE dice que cada quien oremos a nuestor modo. Yo le voy a poner veladoras a Eleguá que es lo que mi madre como Nago me enseñó. DEREK



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