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hola
> Por: CIDCAMPEADOR > 10:04 Hs, Viernes, 27 de Abril 2007 |
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Las descripciones de los diferentes tipos de amigos que tú haces nos vuelven, nuevamente, a la pregunta: ¿No quiero, no puedo, o no debo?
Hay personas con las que comienzas a llevarte muy bien, te encuentras con muchos puntos en común, hay una gran empatía, pero falta ¿qué?: la química sexual. Entonces, aún sin decir expresamente "no quiero", te encuentras claramente frente a un caso en que no quieres nada más que amistad. Y esa es una amistad tranquila y tibia.
Hay otros amigos, con los que permanentemente estás al borde del jugueteo, de la coquetería, de la insinuación aparentemente en broma, en que incluso -y a más de alguno nos ha pasado- tú cada cierto tiempo te preguntas: ¿cómo sería si pasara algo más? Y más aún -y confieso que me ha ocurrido- llegas a imaginarte con esa persona en otra situación. Pero resulta que cuando esa persona es la pareja de otro amigo, o es un compañero de trabajo que tiene toda una familia tras él, o incluso, es la pareja de tu jefe, tú te dices, necesaria y realistamente: no puedo, o no debo. Y esa aparente amistad sigue así, ad eternum, siempre al borde del abismo, siempre en el límite de las miradas, de los roces fugaces y de las palabras traviesas.
Pero vuelvo al primer caso, ese en que tú no quieres. ¿Podrás estar segura de que el otro piensa igual?
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