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Claves para sobrevivir a un viaje con sus nietos

Los viajes agregan un significado especial a la relación que se mantiene con los nietos. Pero si no se conocen algunos secretos, estas salidas podrían convertirse en algo verdaderamente complicado…

Muchos de nosotros ya hemos viajado con
nuestros propios hijos y nietos para celebrar determinados eventos o reuniones
familiares. Sin embargo, cuando se trata de salir de vacaciones sólo con los
nietos, es decir sin sus padres, el comportamiento de los más bajitos es muy
diferente.

En efecto, la sensación de no sentirse
controlados o reprimidos por sus padres, puede hacer que su personalidad cambie
completamente. Sin embargo, como abuelos, es posible que podamos sobrellevar
esto y convertirnos en sus nuevos guías, logrando que todos sus gimoteos,
rabietas y caprichos, se acaben rápidamente. Aunque esta, no es una tarea
sencilla.

La situación era muy diferente cuando
éramos jóvenes, y nuestros propios abuelos vivían a menudo en la misma casa o
muy cerca de la misma. Actualmente, con las distancias y los tiempos del mundo
moderno, tener que convivir en un viaje con nuestros propios nietos puede ser
una experiencia totalmente novedosa, desde el momento en que los vemos pocas
veces al año.

Pero, por otro lado, como muchos de
nosotros nos retiramos antes de lo que lo hacían nuestros padres, también
tenemos una mayor energía y medios necesarios para efectuar esta salida. Con
todo, no podemos ser tan enérgicos como nuestros hijos en el cuidado de los
nietos: por ejemplo, deberíamos casi olvidarnos de hacer largas caminatas o
nadar con ellos, así como también de muchas siestas de la tarde.

Aunque la mayoría de los expertos
recomiendan comenzar con tales viajes cuando los chicos tienen ocho o nueve
años, hay varios casos de abuelos que incluso llevaron a sus nietos de tres
años. Claro, ellos los conocían muy bien y tenían una relación muy cercana, por
lo que sabían cómo manejarse sin sus padres.



A solas con sus nietos

A continuación, le ofrecemos algunos
consejos sobre como manejarse con los chicos y sin sus padres, sin morir en el
intento:

* Comience realizando viajes cortos a
museos o parques zoológicos cercanos, junto con almuerzos en un restaurante o
local de fast-food.

* Recuerde que los chicos necesitan un
cierto tiempo para pasar con sus pares o en lugares donde puedan manejarse
solos.

* Sepa si al niño le gusta manejarse sólo
e independientemente, o prefiere por el contrario ser controlado y tener un
programa más estructurado, lo cual se suele ofrecer en la mayoría de los
cruceros y resort más importantes.

* Al visitar parques temáticos, le
convendría pagar el cargo adicional por poder pernoctar en los cuartos que allí
se alquilan, o para dar a los niños la chance de poder nadar en la piscina del
hotel.

* Si en algún lugar tendrán que estar
parados durante mucho tiempo bajo el sol, sin ningún intervalo, sepa que todos
podrán ponerse irritables, por lo que lo mejor es directamente no concurrir a
esos sitios.

* Además de los medicamentos específicos
que su nieto necesite, lleve un permiso escrito de sus hijos para poder actuar
en caso de emergencias médicas.

* En el caso de que los padres estén
divorciados, y sólo uno de ellos tenga la custodia, debería llevar una carta que
lo autorice a realizar el recorrido junto a su nieto.

* Para los paseos del coche, llevar un
teléfono celular por cualquier emergencia le dará una mayor seguridad.

* No se olvide de llevar ítems para
entretener a sus nietos, como por ejemplo una muñeca o una manta preferida,
autitos, libros y juegos, o un pequeño velador por si el chico suele dormir con
luz.

* Considere seriamente la posibilidad de
que su nieto participe en la planificación del viaje, así como para armar y
guardar un diario de viaje y tomar las fotografías.

* Para evitarles sentimientos de
nostalgia, permita que sus nietos llamen a su casa todas las veces que lo
considere necesario. Incite también al niño a escribirles a sus padres postales
y cartas durante cualquier momento de la trayectoria, de modo que puedan sentir
que siguen en constante conexión con sus padres.

Confíe en estas sugerencias, y vea cuan
satisfactorio resultará el viaje que está planeando. Luego, durante todo el año,
le llamarán por teléfono con una única pregunta: “abuelos… ¿cuándo volvemos a
irnos de vacaciones?”