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Bosquejo autobiográfico

La noche de nuestro compromiso vimos desde la azotea del departamento de mi familia el bombardeo que precedió la caída de Perón…

Nos
casamos el día 28 de Junio de 1955 en la Capital Federal.

Pasamos
una breve luna de miel de 3 días en el hotel del aeropuerto hasta salir para
EE.UU. donde íbamos a practicar Medicina….

Mi
hermana y su futuro marido se encargaron de conducirnos hasta el hotel.

Mi
marido había estudiado neurocirugía con el Dr.Benahim de modo que corrió al
hospital a operar a los heridos.

No
hubo sobrevivientes. Habilidad sin propósito. Algunos habían sido soldados y
otros fueron arrasados en un autobús y eran civiles víctimas de las bombas.

Mirando
al cielo hacia el puerto había sido un despliegue magnífico de fuegos
artificiales . Todos admiramos las luces sin medir las consecuencias.

Nuestra
partida fue celebrada por nuestros
amigos universitarios . Nos desvistieron, nos vistieron con sábanas . Nos
tiraron desperdicios y nos hicieron desfilar por la calle Córdoba, tirando
monedas a los niños para que nos gritaran locos.

Aunque
el Invierno en la Argentina había sido muy crudo nuestra llegada a Nueva York
fue extremadamente calurosa, 41 grados a la sombra.

El
hermano de Josè Benahim que era un experto en tratamiento de quemaduras y
estaba estudiando en NY, nos guió.

Las
ventanas de su automóvil abierta a la vista de los cañones de edificios altísimos
transpirando a mares a pesar de la brisa, estábamos atrapados por el equipaje y
nuestra ropa de Invierno que incluía mi tapado de nutria.

Pasamos
la primer semana en un Hotel del corazón del barrio hispano de NY sin aire
acondicionado. Casi desnudos, con las ventanas abiertas a la resolana, aturdidos
por las sirenas y el tráfico en las calles tratando de concentrarnos en el inglés
de la TV. Viajando a nuestro destino en Wilmington, Delaware, nos sorprendió la
falta de pausa en la edificación.

En
el año 1955 la epidemia de polio mató y paralizó a mucha gente joven.

Mientras
yo roté como interna en cirugía y obstetricia, mi marido hacía guardia en el
servicio de poliomielitis del hospital.

Los
pulmotores respiraban por los enfermos día y noche.

El
trabajo era pesado y hacíamos guardias de 24 horas cada día.

Algunas
veces veía cosas extrañas en la emergencia: hombres rojos, verdes, violetas,
cubiertos por el arco-iris de polvos industriales de la firma Química Dupont en
Delaware.

En
gran parte, nuestro cuerpo de médicos provenía de Las Filipinas y uno de los más
experimentados colegas era un médico alemán que siguió siendo nuestro amigo
por varios años y se recibió de Psiquiatra casándose con la hija del Director
del Hospital Psiquiátrico donde trabajaba.

Mi
marido empezó a operar con los neurocirujanos que trabajaban en el hospital mientras que yo me comunicaba con más facilidad con los pacientes, los
enfermeros y los doctores. Lo más difícil fue para mí comunicarme por el teléfono.

Desde
estudiante estuve interesada en
Psiquiatría después que Luis fue aceptado para entrenamiento en Neurocirugía,
en el Hospital de la Universidad de Pennsylvania me informó de una plaza para
entrenamiento en mi especialidad y allí completé mis estudios de Psiquiatría.

Por
razones de nuestras condiciones de inmigración a EE.UU, emigramos a Inglaterra donde trabajamos por cerca de 2 años en
nuestras especialidades.

Viajamos
por Europa por 6 meses y regresamos a los EE.UU.

En
1960 el presidente Kennedy inició por ley servicios psiquiátricos comunales.

Entré
en el sistema comunitario y ayudé a crear muchos servicios interesantes e
innovadores.

Nunca
me había interesado la investigación pura, aunque durante el entrenamiento
participé en la investigación clínica de la Universidad.

Por
5 años practique Psiquiatría infantil y dirigí una unidad para
preadolescentes en el Hospital Psiquiátrico Infantil.

Con
la participación del Director de Servicios Sociales desarrollamos un programa
de Día, Servicios residenciales y escolares especiales, previniendo el 90% de las admisiones hospitalarias y
reduciendo así los gastos de servicio de $60.000 a $1.500 por año y por niño.

Mi
interés básico permaneció en la Psiquiatría para Adultos así que dirigí
servicios comunales psiquiátricos para adultos
desarrollando un servicio para tratamiento en las residencias de enfermos
mentales agudos. También programas especiales para sordos y ancianos mentales.

En
los últimos 10 años he tratado enfermos con problemas de alcohol y drogas con
enfermedades mentales.

Mi
marido recién se retiró, pero durante su carrera ganó reconocimiento internacional como Jefe de Neurocirugía
infantil en uno de los mejores hospitales infantiles de EE.UU., el hospital para
niños de Hula.

Su mayor interés ahora es la navegación a vela y hemos navegado por muchas partes del mundo . También le atrae la
cocina y tiene un buen conocimiento de vinos . Nunca olvida un buen restaurant o
chef y es una fuente de información.

Por
los pasados 30 años mi interés ha sido pintar . Cuando tenía 14 años gane un
concurso de dibujo nacional en la Argentina.

En
EE.UU he exhibido y ganado premios en Maryland. Preocupada por la falta de
conocimientos en EE.UU de la comida Sudamericana investigue en Buenos Aires la comida regional y de Sudamérica
y compuse un libro con una amiga norteamericana .

Ella probó las recetas e hizo
las equivalencias de medidas. Coloqué ese trabajo en la red Internet con el
nombre TangoFood.com.

En
el ultimo año empecé a escribir .
Completé una novela de aventuras y
una de Detectives influenciada por los viajes que hacemos con mi marido en los
EE.U.U y el extranjero. También accesibles en Internet en ArtLydia.com.