Ríos que se vuelven rojos. Paisajes tan blancos que enceguecen. Colinas de
chocolate. No, no son historias de ciencia ficción. Son maravillas de la
naturaleza que lo dejarán boquiabierto y preguntándose si eso es posible. ¿Y
sabe qué es lo mejor? Que usted no necesitará una nave espacial para llegar
allí.
Las
colinas del chocolate, Filipinas
Río Tinto, España
El Río Tinto es literalmente un río rojo, y el nombre es completamente apropiado.
Este río de 62 kilómetros de largo se vuelve realmente rojo.
¿La causa? Una combinación de bacterias poco comunes, una baja proporción de
oxígeno, y la contaminación generada por la minería de oro, plata y cobre, que
se han desarrollado desde el año 3.000 AC. Este río y el paisaje de esta zona
del suroeste de España son tan extraños que científicos de la NASA han estudiado
su composición.
Véalo en persona: Hay un micro diario desde Sevilla a la ciudad de Riotinto, con
escala en la ciudad de Huelva. El viaje dura unas tres horas.
Una vez en la ciudad, visite el Museo de Minería, donde podrá reservar una
visita guiada a una mina, así como un viaje en tren a lo largo del río para
verlo en todo su esplendor.