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Trastorno de estrés postraumático

El trastorno de estrés postraumático (TEPT) es una condición debilitante que sigue a un evento de intenso terror que deja una profunda marca en nosotros. Conocerlo es el primer paso para encontrar una solución…

Un testimonio

 “Fui violada a los 25 años. Por mucho tiempo hablé de esa violación a un nivel
intelectual como si fuera algo que le hubiera pasado a otra personas.

Yo
sabía muy bien que me había pasado a mí, pero sencillamente no existía una
sensación. Por un tiempo me saqué el bulto de encima.


Empecé a tener recuerdos retrospectivos. Me llegaban como un golpe de agua.
Estaba aterrorizada.


Repentinamente comencé a revivir la violación. Cada momento era sobrecogedor.
Sentía que mi cabeza se movía un poco, sacudiéndose, pero eso no era verdad.

Me
sofocaba o se me secaba la boca y mi respiración cambiaba. Estaba como
suspendida.

No
sentía el cojín sobre el cual estaba sentada o que mi brazo estaba tocando un
mueble. Parecía estar dentro de una burbuja como si flotara. Era de dar miedo.
Tener recuerdos retrospectivos puede causar opresión. Lo deja a uno agotado.

La
violación tuvo lugar una semana antes de Navidad y me siento como un hombre lobo
cerca de esas fechas.

El
cambio a ansiedad y miedo es increíble”.


 Origen y síntomas

 Frecuentemente, las personas que sufren de TEPT tienen persistentemente memorias
y pensamientos espantosos de su experiencia y se sienten emocionalmente
paralizadas, especialmente hacia personas que antes estuvieron cerca de ella.

El
TEPT, conocido antes como sobresalto por proyectil o fatiga de batalla, fue
traída a la atención pública por los veteranos de guerra pero puede ser el
resultado de varios otros incidentes traumáticos.


Incluyen rapto, graves accidentes como choques de automóviles o de trenes,
desastres naturales como inundaciones o temblores, ataques violentos tales como
asaltos, violaciones o tortura, o ser plagiado.

El
evento que desata este trastorno puede ser algo que amenace la vida de esa
persona o la vida de alguien cercano a ella.

O
bien, puede ser algo que vio, como por ejemplo la destrucción en masa después de
la caída de un aeroplano.  


Cualquiera que sea la razón del problema, algunas personas con TEPT
repetidamente vuelven a vivir el trauma en forma de pesadillas y recuerdos
inquietantes durante el día.


Pueden también experimentar problemas de sueño, depresión, sensación de
indiferencia o de entumecimiento o se sobresaltan fácilmente.


Pueden perder el interés en cosas que antes les causaban alegría y les cuesta
trabajo sentir afecto.

Es
posible que se sientan irritables, más agresivas que antes o hasta violentas.

 El
ver cosas que les recuerdan el incidente puede ser molesto, lo que podría
hacerles evitar ciertos lugares o situaciones que les traigan a la mente esas
memorias.


Los aniversarios de lo que sucedió frecuentemente son muy difíciles. 


Sucesos ordinarios pueden servir de recordatorios del trauma y ocasionar
recuerdos inquietantes o imágenes intrusas.


Los aniversarios de lo que sucedió frecuentemente son muy difíciles.

 El
TEPT puede presentarse en cualquier edad, incluyendo la niñez.

El
trastorno puede venir acompañado de depresión, de abuso de substancias químicas
o de ansiedad.


Los síntomas pueden ser ligeros o graves; las personas pueden irritarse
fácilmente o tener violentos arranques de cólera o de mal humor.

En
casos severos, los afectados pueden tener dificultad para trabajar o para
socializar.

En
general, los síntomas pueden ser peores si el evento que los ocasiona fue obra
de una persona, como en el caso de violación, a comparación de uno natural como
es una inundación.

 Los eventos ordinarios pueden traer el trauma a la mente e iniciar recuerdos
retrospectivos o imágenes intrusivas.

Un
recuerdo retrospectivo puede hacer que la persona pierda contacto con la
realidad y vuelva a vivir el evento durante un período de unos segundos o por
horas o, muy raramente, por días.


Una persona que tiene recuerdos retrospectivos que pueden presentarse en forma
de imágenes, sonidos, olores o sensaciones, generalmente cree que el evento
traumático está volviendo a repetirse.


 Diagnóstico y evolución

 No
todas las personas traumatizadas sufren un verdadero caso de TEPT o experimentan
TEPT en lo absoluto. Se diagnostica TEPT únicamente si los síntomas duran más de
un mes.

 En
aquellas personas que tienen TEPT, los síntomas generalmente comienzan tres
meses después del trauma y el curso de la enfermedad varía.


Hay quienes se recuperan dentro de los siguientes 6 meses; a otros, los síntomas
les duran mucho más tiempo. En algunos casos, la condición puede ser crónica.
Ocasionalmente, la enfermedad no se detecta sino hasta varios años después del
evento traumático.

 Tratamiento

 Los medicamentos antidepresivos y los que se recetan para tratar la ansiedad,
pueden disminuir los síntomas de la depresión y los problemas de sueño.

 La
psicoterapia en sus diversas variantes, incluyendo la terapia de cognitiva, es
una parte integral del tratamiento.

En
ocasiones el exponerse a lo que el trauma recuerda, como parte de la terapia,
por ejemplo, regresar a la escena de una violación, puede ayudar.

 Además, el apoyo de los familiares y amistades puede agilizar la recuperación.