Nos ayuda a “ver” todo aquello que nos mantiene cautivos en una ilusión.

Descubrirse y sentirse, nos torna más sensibles, sensitivos, nos aliviana de  cargas innecesarias, nos regala armonía, comprensión, libertad. 

Ella está integrada a muchas filosofías orientales de meditación y también la hallamos explícita dentro de sabidurías muy antiguas, como un lenguaje mas entre los Hombres y la Energía Universal, hasta un modo más de trabajo interior.

Se trabaja bajo hipnosis consciente, o sea una profunda relajación de la mente las emociones y el cuerpo, para llegar al estado Alfa. (Un estado igual,  al estado justo antes de entrar al sueño).

Desde este estado existe la posibilidad de acceder a recuerdos profundamente olvidados que obstaculizan el libre funcionar de la energía, creando conflictos que perturban nuestra libertad. Y nuestra comunicación “real” con nuestro SER y su voz.

Se trata de un tipo de trabajo  en el cual no interviene, movimiento mental voluntario de búsqueda en la dirección del pasado. No se utiliza aquí la palabra,  o bien muy poco.

Bajo este estado llamado Alfa se llega directamente aún a los primeros meses de vida, y más allá… mirando, viendo, descubriendo velos, oyendo y SINTIENDO, de modo de ir iluminando las zonas ocultas a nuestra memoria y adquiriendo comprensiones más reales.

De éste modo vamos experimentando, muchas veces de manera muy rápida, profundas transformaciones.

Pero también nos abre las puertas a un mundo atemporal de incomparable belleza, desarrollando nuestra percepción, sensitividad, creatividad, intuición. Mostrándonos que no hay casi nada que sea casual.

Que todo ES, en todas partes y en un mismo lugar. Que todo es un infinito proceso de desarrollo del Ser,  tratando de encontrar su verdadero “Yo” y el significado del Amor.

Nos enseña a sentir que nunca estamos solos,  a desapegarnos de aquellas cosas que consideramos nuestras seguridades (o sea “la ilusión”)  a las cuales nos aferramos por el temor a ser libres.

El Alma tiene un lenguaje propio, en imágenes. Bajo el estado de hipnosis consciente se llega a descubrir este lenguaje, a vivirlo, comprenderlo y aprenderlo.

No únicamente tenemos la posibilidad de un conocimiento de nuestra propia vida actual, y de otras, sino de la vida del mundo, de un TODO.

Dejándola a ella hablar, a su modo, con sus imágenes, tenemos sí, la posibilidad de sanar muy antiguas estructuras que quizá ni las tengamos presentes hoy, pero ellas van moviendo de manera mecánica nuestras vidas, ocasionando sin nuestra voluntad ni deseo, una repetición continua de la misma situación, no permitiéndonos “ser” y tampoco saber cuales son nuestros verdaderos “sueños de nacimiento”.

Estos “sueños de nacimiento” que todos tenemos visibles y sentibles, hasta mas o menos los 5 años de edad, son la razón por la cual hemos venido a esta vida, o bien en ellos radica ésta razón.

Todo pensamiento consciente o no, es por si mismo una visualización.

Entonces pensemos que,  dependiendo de lo que está guardado en nuestra historia personal, (o archivos personales) estos se convierten en una visualización que va creando, queramos o no, nuestras vidas.

Conocer esto, y la manera de trabajarlos, es vital para una posible transformación de nuestras vidas hacia lo que sí queremos que  ella sea, generando lo mismo en nuestro entorno.

Y hacia un encuentro con nuestra verdadera razón de ser. 

Por Maria Cristina Catuara
Terapeuta transpersonal
Cel: (011) 15-5313-6293
[email protected]
http://terapiasdevidaspasadas.blogia.com

Descubre una nueva herramienta de autodescubrimiento y ayuda a los demás con nuestro curso gratis de Psicología Transpersonal.  Inscríbete ahora haciendo clic aquí.