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Dar propina en Europa, ¿sí o no?

Dar propinas en Europa podría ser muy distinto a lo que se acostumbra en tu país de origen. Aquí te contamos todos sus secretos…

"Gracies per la propina…"

Dar propina en Europa no es un acto automático y de pautada generosidad como ocurre en la mayoría de los países americanos.

Si estás acostumbrado a dar propina según tus recursos, según tu propia filosofía, según las circunstancias, o según cómo te han servido, este artículo te será más que útil —y si no estás pensando en viajar, de todas formas lo encontrarás muy interesante—.

Teniendo en cuenta la gran cantidad de países que componen el continente Europeo, suena lógico que las costumbres en cuanto a la propina varíen de una nación a otra. No obstante, se pueden precisar algunas reglas generales. 

En los restaurantes, revisa el menú para ver si el servicio está incluido en el precio. Si no es así, una propina de entre el 5% y el 10% será normal —observa la información detallada más abajo—. Para los taxis, redondea hacia arriba la tarifa del contador electrónico. 

Dejar propina por un servicio especial es algo optativo. Es algo muy considerado dejar una propina de algunos Euros a alguien que es capaz de mostrarte una vista especial, por ejemplo, de las tumbas etruscas.

Los guías que dan charlas en lugares públicos o sobre autobuses o embarcaciones, con frecuencia, suelen extender sus brazos ofreciendo las palmas de sus manos una vez finalizadas las charlas.

Si ya has pagado por el tour, no des una propina extra —si sientes que debes hacerlo, un euro o dos serán suficientes por un trabajo bien hecho—.  

En cuanto a los hoteles, si lo deseas, puedes dejar un Euro al portero por cargar tus valijas y, al final de la estadía, dejar un par de Euros en la habitación para el servicio de limpieza por haber mantenido las cosas en orden.

En general, cuando alguien en la industria de los servicios hace algo extraordinario por ti, una propina de unos pocos euros será apropiado —aunque no indispensable—. 

Cuando tengas dudas, pregunta. Los franceses y los ingleses generalmente dan propina a los peluqueros, aunque los daneses y los suecos no suelen hacerlo.

Si te sientes confundido en cuanto a si dar propina o no por un determinado servicio, pregunta al personal del hotel y ellos sabrán indicarte en forma apropiada. 

Dejar propina en restaurantes 

Las propinas en los restaurantes son más modestas en Europa que en América. De hecho, en Europa una propina del 10% es una buena propina —en América posiblemente te estarían mirando ofendidos ante semejante muestra de avaricia—.

Si provienes de un país con una economía dolarizada, guarda tus verdes en el bolsillo. Por un tema de principios —cuando no de economía—, la moneda local debería prevalecer.  

El tema de las propinas es una cuestión a ser tenida en cuenta únicamente en aquellos restaurantes que tienen mozos y camareras. Si ordenas comida en el mostrador —en un pub, por ejemplo—, no des propina. 

Por lo general, una cartilla de menú, en cualquier país, dejará en claro —en la parte inferior de la misma— si el servicio está incluido. Por ejemplo, un menú italiano dirá: “Servizio Incluso”.

En esta caso, los cargos del servicio de, aproximadamente un 15%, estarán incluidos en el precio del menú o serán agregados en forma automática al importe de tu factura.

Cuando el servicio de mesa se encuentra incluido, no necesitas dar propina alguna, aunque si te sientes verdaderamente halagado y feliz con el trato que has recibido, podrás dejar unos euros sobre la mesa. 

Si la cartilla del menú deja en claro que el servicio no está incluido —por ejemplo, en Francia, “service non compris” o “s.n.c.”—, calcula una propina de entre el 5% y el 10% redondeando hacia arriba o dejando el vuelto de tu pago. 

Comúnmente, suele ser mejor dar la propina mientras abonas la cuenta al mozo que dejarla sobre la mesa, sobre todo cuando los lugares están atestados de gente y en los que cualquier vivillo tiene la posibilidad de llevarlos a su bolsillo.

En las culturas germanas, en lugar de dejar físicamente una propina sobre la mesa, se considera que la acción más discreta y clásica es decir al camarero cuánto debe guardarse en el momento de pagar la factura.

Por lo tanto, si la factura asciende a 78 euros, puedes darle 100 euros a la vez que le dices: “85”. Recibirás 15 euros de vuelto y te sentirás un buen europeo.

En algunos lugares, como Italia, es mejor dar la propina en efectivo incluso cuando pagas con tarjeta de crédito. De lo contrario, la propina podría nunca llegar a sus manos.

Siguiente: Dar propina en Alemania, Austria o República Checa