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La hora del esmoquin

Tarde o temprano, a todos les llega la hora de calzarse el esmoquin. Por eso, enplenitud le enseña todo lo que tiene que saber para que tenga la mejor ropa de etiqueta

Es una necesidad que tarde o temprano tendrá que enfrentar. Sin dudas, la mayor parte de las personas se sentiría a gusto vistiendo jeans y zapatillas todos y cada uno de los días, pero, a veces, no es posible.

¿O usted cree que podría asistir con unas bermudas al casamiento de su hermana?  

Ha llegado el momento de vestirse de etiqueta. Ya sea una promoción, una cena de trabajo o una ópera, todas son ocasiones especiales que ameritan una vestimenta especial. Así que, la primera pregunta que surge es: ¿comprar o alquilar un esmoquin? 

Por supuesto, la respuesta no es demasiado complicada. Si usted prevé vestirse de etiqueta varias veces en los próximos dos o tres años, vale la pena invertir en un esmoquin clásico.

Por otra parte, es probable que no pueda pagar uno o no planee usarlo a menudo, entonces la mejor alternativa será rentarlo.   

Consejos a la hora de alquilar un esmoquin 

En primer lugar, usted debe identificar el tipo de evento al que asistirá y la hora del día en que se realizará, es decir, si es diurno o nocturno. A partir de allí, deberá optar entre un esmoquin clásico y conservador, o algo más estilizado.

Asimismo, intente saber cómo irán vestidos los otros participantes (lo que usted menos quiere es vestirse en una sintonía distinta al resto). Por otra parte, si planea ir acompañado por su pareja, sería apropiado que le pregunte por lo que va a utilizar, de modo que ambos puedan complementarse definiendo un estilo conjunto.   

Si se decide por alquilar un esmoquin, asegúrese de reservarlo con un buen tiempo de anticipación. Por lo general, un par de semanas de antelación será suficiente, pero en caso de un baile de graduación o de un casamiento sería conveniente reservarlo de uno a tres meses por adelantado.

La temporada de graduaciones es agitada y los estilos y talles más tradicionales suelen volar de los estantes. En otro orden, los casamientos requieren una gran planificación, tanto si usted es el novio, el padrino de bodas como si es el portero; así que no deje todo para último momento, ya que los trajes de etiqueta suelen desaparecer, sobre todo en la temporada de bodas. 

En cuanto al presupuesto, espere pagar entre u$s 50 por un esmoquin convencional hasta u$s 200 por un de primera marca. Tenga en cuenta que los precios del alquiler varían según el período de tiempo que decida rentarlo. 

¿Qué es un esmoquin? 

Por definición, un esmoquin es un traje completo que incluye saco, pantalón (generalmente con una raya de seda al costado), moño y, a menudo, faja (para utilizar alrededor de la cintura). 

Por lo general, un esmoquin común presenta solapas de raso con un agujero para colocar una flor. También puede elegir un saco recortado, que por lo general es usado con una levita.

Es corto en el frente (generalmente sobre la línea de la cintura) y tiene una hendidura en el dorso (presentando dos piezas de tela, como si fueran dos “colas”). Tenga en cuenta que los sacos suelen venir en varios modelos. Mientras que algunos son clásicos, otros son más modernos y estilizados, acompañando las tendencias de la moda.        

Los pantalones tradicionales tienen unas cintas de raso que acompañan las costuras laterales. Al no presentar ojales para el cinturón, el pantalón deberá ser hecho a medida por un sastre, o utilizado con tiradores de botones blancos o negros. Recuerde que los pantalones de etiqueta no deben llevar doblez.  

Existen tres tipos básicos de camisas para usar con un esmoquin: de cuello doblado (pajarita), doblado hacia abajo o caído, y mandarín. Las camisas más clásicas presentan cuello de pajarita y se las suele acompañar con moño y faja ancha. 

Por otra parte, los zapatos deben ser de charol y, por sobre todas las cosas, simples. De más está decir que deberá mantenerlos bien lustrados. Elija entre los zapatos con cordones (la opción más formal) o mocasines. 

El esmoquin tradicional debe utilizarse con moño y con faja o chaleco (por supuesto, todos en combinación). La faja debe ser utilizada alrededor de la cintura y su pliegue debe apuntar al frente. Dependiendo de la ocasión, usted podrá combinar su esmoquin con una galera.      

Sobre los colores, obviamente el esmoquin tradicional viene en negro o en blanco, pero también puede encontrar variedad en gris, plata y marfil.

Finalmente, como no podía ser de otra manera, existen esmóquines de colores más modernos o tendenciosos, pero poco apropiados para las ceremonias serias. Y quédese tranquilo, cuando vea uno sabrá por qué no son apropiados para eventos glamorosos.

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