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Precursores de la hormona de crecimiento

Todo lo que debe saber sobre esta nueva versión de la “fuente de Juvencia”: los secretagogos de la hormona de crecimiento

Aunque administrar hormona de crecimiento (HCH) es ilegal,
los suplementos orales de esta hormona no lo son. En realidad, estos suplementos
no son HCH, pero pueden supuestamente estimular la hipófisis para que produzca
más HCH.


Los precursores o secretagogos de la hormona de crecimiento
(HCH) no contienen hormonas verdaderas, sino aminoácidos que supuestamente
estimulan la producción de HCH. Algunos aminoácidos que afectan los niveles de
hormona de crecimiento humanos incluyen la L-
glutamina, L-arginina,
L-ornitina y L-lisina
.

Las mismas se comercializan en polvos y tabletas, y son los aminoácidos más
comúnmente usados en suplementos deportivos, especialmente los que incluyen L-arginina
y L-glutamina,
que son los más populares.

Con respecto a su utilidad, los resultados de las
investigaciones disponibles varían. Un estudio realizado con suplementos de
aminoácidos demostró ser contraproducente para los niveles naturales de
glutamina.
Los suplementos de L-arginina  reducen
los niveles de glutamina, mientras que los suplementos de L-glutamina
demostraron enlentecer la producción de glutamina.

Otro estudio, en cambio, indica que si bien un aminoácido, por sí
mismo, no estimulará la producción de hormonas de crecimiento, una combinación
de aminoácidos puede estimular la hipófisis (al menos en los atletas
moderadamente entrenados que fueron los sujetos del estudio).


Los suplementos de HCH no deberían en teoría ser
utilizados por gente de entre veinte y treinta y cinco años, como un remedio
anti-edad, pero esta es la edad ideal para utilizarlos como suplementos
musculares y para aumentar los beneficios de los aminoácidos.

La forma de presentación de estos productos también deben
ser tomadas en consideración. Las tabletas, en comparación con la presentación
en polvo, no dará los suficientes aminoácidos para estimular la producción de
HCH. Los polvos, en cambio, se absorben muy rápidamente. Si se las absorbe
lentamente, probablemente jamás llegarán completamente a la hipófisis.

Como sucede con cualquier tipo de medicamento, usar los
aminoácidos por encima de los niveles recomendados, o sin consultar con su médico
de cabecera, podría provocar problemas en el futuro.

La L-arginina podría causar o agravar enfermedades como la
gastritis y la úlcera péptica, y la L-glutamina podría interferir con otro
tipo de medicinas, como las psiquiátricas. Como siempre, el paciente debe estar
muy bien informado sobre el producto que tomará.

Pero además del tipo de medicamento, también debe ser muy
considerada la dosis de sus componentes. Los
secretagogos
y suplementos requieren más estudios para saber si son bioactivos, ya que los
estudios tradicionales han demostrado que sólo las dosis altas pueden estimular
la hormona de crecimiento, pero estas mismas dosis pueden también causar
efectos secundarios.

Teniendo en cuanta la gran cantidad de personas de mediana
edad que buscan una terapia anti-edad, o simplemente un suplemento para rendir
mejor como atletas, no sería raro que veamos multiplicar la oferta de este tipo
de productos en el mercado.

Pero es justamente por esta razón, y las expuestas
anteriormente, que se debe estar muy alerta, y consultar a los médicos u
observar muy detenidamente las medidas de seguridad, calidad, y autorizaciones
en los envases de productos relacionados con la HCH.