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La Carta del Mundo

¿Quién es el personaje que aparece en el centro de la carta?¿Cómo puede influir esta carta en nuestra vida?

Siendo la última Carta del Tarot
aparece como si todo acabase aquí, pero fijémonos en los detalles. El personaje
esconde su sexo, el torso es de mujer, pero ¿y el sexo? Queda tapado. La duda
aparece… Nada es por casualidad en el Tarot y esto tampoco. Algunos textos nos
hablan que el personaje central de la carta de EL Mundo es un andrógino, otros
que es una mujer, pero… ¿hay algún detalle que nos confirme dicha afirmación?

Un análisis detallado de las cartas
del Tarot de Marsella nos muestra una interesante combinación entre lunas y
soles. Las primeras aparecen en cartas femeninas y los segundos en las
masculinas, confirmando dicha asociación simbólica.

Ahora, bien, dichos símbolos solares
y lunares, aparecen en todas las cartas por separado;  la unión de sol y luna
aparecen simultáneamente únicamente en un solo lugar: y este no es otro que los
pechos del personaje donde apreciamos un sol, es decir, un punto dentro de un
círculo, y en la parte inferior una luna. Este descubrimiento de Daniel Rodes y
Encarna Sánchez, ha confirmado la idea que efectivamente nos encontramos ante la
figura de un andrógino; este y muchos otros descubrimientos los encontrarás en
los cursos que ellos han elaborado minuciosamente y que ahora tienes la
posibilidad de obtenerlos vía online

Le Mat se empieza desnudando,
sacándose lo que le hace diferente a los demás, sus ropajes. Después los
diferentes personajes, primero nos hablan de arquetipos, que podemos encontrar
en la calle, el primer septenario. Luego en el segundo septenario, aparecen
seres, que no nos podemos encontrar, son cualidades del alma y así se llama el
segundo septenario, el del alma. Y ya en el último septenario los personajes
aparecen desnudos en su mayoría. Es el septenario del espíritu.

Aquí el cielo gana protagonismo. Y
los personajes se muestran tal y como son, sin ambages, a pecho descubierto,
como diríamos en el lenguaje coloquial. Para llegar final, al ser completo, sin
tapujos. Se cubre la entrepierna para decirnos, que lo que realmente importe es
el ser, nada más.

Esta rodeado de una corona de
laurel, símbolo de los que han llegado al final de la carrera. De los ganadores.
Y a su alrededor, las cuatro sagradas criaturas vivientes, los cuatro elementos
sublimados, en su máxima expresión. Significa haber llegado a la comprensión de
todos los misterios. El Ser Completo.

Aunque nuca hay que olvidar lo que
dijo el poeta. Lo importante no es llegar a Ítaca, lo verdaderamente importante,
es el camino que nos ha conducido a ella. La gente que hemos conocido en ese
camino, lo que hemos aprendido.

Cuando emprendas tu viaje a Ítaca

pide que el camino sea largo,

lleno de aventuras, lleno de
experiencias.

Que muchas sean las mañanas

a puertos nunca vistos antes.

Ten siempre a Ítaca en tu mente.

Llegar allí es tu destino.

Más no apresures nunca el viaje.

Mejor que dure muchos años

y atracar, viejo ya, en la isla,

enriquecido de cuanto ganaste en el
camino.

(C.P.Cavafis)