Como conseguir la custodia de tu mascota en caso de divorcio

Con frecuencia, las mascotas son causa de disputa dentro de los procesos de divorcio.

Ambas partes desean quedarse con ese compa�ero fiel, tal vez, para que los ayude a superar el dif�cil momento. Y, muchas veces, es m�s dif�cil que un hombre resigne a su perro que a su sill�n favorito.

No es ning�n secreto: los animales son, a menudo, tratados como a los ni�os dentro de una familia. Y t� no est�s dispuesta a perder a uno de tus ni�os. Esto es lo que debes hacer para conseguir la custodia de tu mascota, al momento de enfrentar un divorcio.

�Qu� debes hacer?

Entiende que, aunque sientas que tu mascota es un miembro m�s de la familia, para el tribunal es s�lo una posesi�n material que debe ser dividida.

� Debes saber que si el animal era tuyo antes del casamiento, o si has sido su permanente cuidador durante los d�as de matrimonio, t� tienes las mayores posibilidades de quedarte con la custodia.

Hazle saber a tu abogado lo importante que es tu mascota para ti. De esta manera, te asegurar�s que el tema sea tratado como una prioridad.
Por otra parte, si tienes la custodia de los chicos, lo m�s l�gico es que la mascota viviera donde ellos est�n, debido a que, casi seguro, habr�n formado una relaci�n de extrema proximidad.
Trata de hablar con tu pareja al respecto para ver si pueden llegar a un acuerdo amistoso. Incluso, podr�as permitirle hacer visitas programadas.
Evita separar a las mascotas cuando son dos o m�s de la misma especie. Esto podr�a ser el disparador de un cuadro depresivo o de ansiedad para los animales.

Entiende que si tienes una mascota valorada, tal como una gato o un perro de exposici�n, el animal ser� considerado por la corte como una posesi�n valiosa. Incluso, pueden considerarlo como un negocio si, por ejemplo, lo utilizas como semental para vender a sus cachorritos.
Debes mostrarle al juez que eres la persona m�s indicada para cuidar al animal. Tienes tiempo para jugar con �l; para ejercitar y para asearlo. Demuestra que tienes el suficiente espacio en tu casa para el animal. Si es necesario, consigue el testimonio de tu veterinario sobre tu capacidad de cuidado para con el animal.