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Los años también llegan para las mascotas

No solo los seres humanos envejecen. Si quieres saber como afrontar los problemas que el envejecimiento trae a tu mascota, no dejes de leer esta nota

Cuando las mascotas cumplen siete años,
en promedio, un equivalente a 50 años en los seres humanos, son cada vez más
susceptibles a sufrir problemas de salud tales como obesidad, fallas de riñón,
ceguera, o enfermedades del corazón. Y aunque también podrían seguir gozando
de una muy buena salud, en cualquiera de todos los casos, sus necesidades
cambiarán, y usted debería estar atento a estos cambios.

En efecto, es muy importante saber que
cuando un perro envejece, es posible observar algunos cambios en su conducta. En
este sentido, es fundamental que sepa cómo reconocer estos signos de
envejecimiento, comprenda los efectos que este proceso causa, y conozca lo que
su veterinario podría hacer para aliviarlo.

Así, cuanto más sepa acerca de los
cambios producidos en su animal, tanto en su condición física como en sus
dietas, más podrá hacer para prolongar su vida y mantener su salud durante sus
años de adulto, pudiendo tenerlo feliz y sano durante esta etapa de su
existencia.

Puntos imprescindibles a saber sobre el envejecimiento de su mascota

  1. Más
    intolerante al calor

A medida que los perros envejecen,
producen menor cantidad de las sustancias necesarias para mantener la
temperatura normal del cuerpo. Aunque este es un proceso normal en el
envejecimiento, siempre es necesario regular su exposición prolongada al calor,
y notificar a su veterinario de alguna agitación o jadeo excesivo. 

  1. Más
    gordo

La obesidad es uno de los riesgos más
significativos en el envejecimiento de los perros. De hecho, es muy común que
las mascotas tengan una tendencia a engordar, como resultado directo de su más
débil metabolismo, y sus niveles más bajos de actividad física. La obesidad
es poco sana en cualquier perro, pero puede ser especialmente peligroso en
aquellos adultos, ya que afecta en mayor medida su corazón.

Pero la obesidad no es, de hecho, la única
condición que suele surgir en los perros adultos. En efecto, también se pueden
encontrar otras como la artritis, las enfermedades dentales, las enfermedades
del corazón, las cataratas, el hipotiroidismo, la incontinencia, las
enfermedades del hígado, las enfermedades del riñón, y el cáncer. En todos
los casos, una visita al veterinario será imprescindible.
 

  1. Menos
    dientes

Si bien es bastante normal que los perros
mayores pierdan parte de su dentadura, esta pérdida a menudo los lleva a mascar
con dificultad, lo cual, a su vez, los puede llevar a modificaciones en su
apetito y a ciertos cambios de conducta. El riesgo más grave sin embargo, es
que se extiendan bacterias e infecciones alrededor de la boca del perro.
Asimismo, los tumores de boca también son más probables a medida que avanza su
edad.

En este sentido, su veterinario puede
recomendarle cepillar o limpiar los dientes de su animal de forma regular, con
un cepillo de dientes y una pasta dentífrica especial para mascotas, pero no
con la pasta dentífrica para uso humano. Si es necesario, es posible que el
veterinario también le recomiende que los dientes del perro sean limpiados
profesionalmente.
 

  1. Piel
    más sensible

Los perros más viejos tienen, por
supuesto, una piel más vieja, que es menos elástica y se cicatriza menos rápidamente
que cuando eran jóvenes. De la misma forma, es más común que se observe una pérdida
de cabello en su adultez, ya que los folículos del cabello son menos activos. Y
como las funciones del sistema inmunitario de la piel también se debilitan, es
posible que dentro y debajo de la piel también surjan tumores.

  1. Dificultades
    para ver, oler, saborear, u oír

Los sentidos de los perros disminuyen con
el tiempo, y en más de una oportunidad, volver a hacer sus sencillas tareas
diarias se convierte en un inesperado y verdadero desafío para ellos. La mayoría
de los perros logran asumir estas pérdidas sin mayores problemas, pero es común
que surja alguna disminución en su apetito, ya que se afectan sus sentidos
gustativos y de olfato.

Para estos perros, lo ideal sería que se
les provea de una dieta bien equilibrada y sumamente nutritiva, la cual se
encuentra en muchos alimentos balanceados. Ciertas enfermedades del ojo, como la
glaucoma y las cataratas, también son más frecuentes en los perros más
viejos, mientras que las infecciones o los tumores de ojos u orejas también
suelen ocurrir más a menudo en la adultez que cuando son jóvenes.  

  1. Problemas
    en
    los
    órganos reproductore
    s

Los perros que no han sido castrados o
esterilizados, podría desarrollar infecciones o incluso tumores de la glándula
de próstata. De la misma forma, mientras que aquellos que han sido
esterilizados o castrados desde muy jóvenes difícilmente desarrollen tumores
de seno, no sería extraño que si lo hagan en sus años de adultez.

Los perros más viejos pueden también
permanecer fértiles en la vejez, lo que les puede llegar a provocar embarazos
no deseados, algo que podría ser muy perjudicial para salud, e incluso puede
poner en riesgo su vida.

  1. Problemas
    en los pulmones, riñones, y vesícula

 Como se puede suponer, los órganos
internos de los perro han estado trabajando continuamente durante mucho tiempo,
por lo que no sería nada raro que ellos funcionen más lentamente, o menos
efectivamente, durante sus años de adultez.

Por esto mismo, muchos veterinarios
sugieren completas evaluaciones geriátricas de salud, para estar bien al tanto
de los estados de sus órganos internos, así como también ciertos cambios en
las dietas.

 En este sentido, es bueno saber que
si su perro adulto come alimentos formulados para animales menores, las más
altas cantidades de nutrientes como la proteína, el fósforo, y el sodio, podrían
dañar su cuerpo con el tiempo. 

  1. Expectativa
    de vida

Los promedios generales de expectativas de
vida en los perros, indican lo siguiente:

Perros de raza grande (más de 22 kilos):
de 7 a 10 años (en estos perros, 7 años equivalen a 65 años en los humanos)

Perros de razas medianas (13 a 22 kilos):
12 a 14 años (en estos perros, 7 años equivalen a 58 años en los humanos)

Perros de de razas pequeñas (hasta 13
kilos): hasta 15 años (en estos perros 7 años, equivalen a 49 años en los
humanos)