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Lego, el juguete de la imaginación

¿Cuántas horas de nuestras infancias hemos pasado armando nuestros castillos de Lego? ¿Cuánto nos hemos enorgullecido al mostrárselos a nuestros padres? Y… ¿Cuánto sabemos de sus historia?

La historia de
Lego
comienza en 1934, cuando una compañía danesa productora de juguetes, decidió
adoptar el nombre LEGO para todos sus productos.

Este nombre estaba formado por
las palabras danesas "LEg GOdt" (jugar bien). Más adelante, se comprobó que en
latín las palabras significan "yo estudio" o "pongo juntos"; una irónica
coincidencia que sigue a los juguetes desde hace décadas.

 La pequeña firma, que
contaba en sus principios con solo una docena de empleados, continúa hasta hoy
en día fabricando el popular juguete, para lo cual tuvo que superar grandes
obstáculos, del cual, sin dudas, el mayor de ellos fue el incendio entero de la
fábrica en 1942. Sin embargo, la fuerza de la marca pudo más, y la fábrica se
reconstruyó en un lapso relativamente corto.

 Poco tiempo después de
este incidente, más precisamente en 1947, la compañía LEGO fue la primera en
Dinamarca en comprar una máquina de inyección de plástico para hacer sus
juguetes, lo cual le posibilitó tomar la delantera por sobre la  competencia,
instalándose como empresa más importante dedicada al rubro del juguete en su
país.

 Para ese entonces,
todavía no existían los ladrillos de LEGO tal como los conocemos en la
actualidad. De hecho, la fábrica produjo aproximadamente 200 variedades
diferentes de juguetes de plásticos y de madera.

Sin embargo, ya habían creado a
los precursores de estos ladrillos, bajo el nombre de Automatic Binding
Bricks
(ladrillos de unión automática); para ese entonces, estos ladrillos
estaban disponibles solamente en Dinamarca.

 En el año 1950, Godtfred
Kirk Christiansen -hijo del fundador de LEGO, Ole Kirk Christiansen – fue
designado como vicepresidente de la compañía. Godtfren había trabajado en la
compañía desde un principio, aprendiendo rápidamente el negocio del rubro del
juguete.

Para 1951 los juguetes
plásticos se habían transformado en la mitad de los pedidos de la compañía
(recordemos que anteriormente se solían fabricar solo con metal o madera),
puesto que este material era más cómodo, seguro, y novedoso.

Debido a esto, los
Ladrillos de Cobertura Automática cambiaron su nombre al más práctico
"LEGO Mursten" o "Ladrillos LEGO", un término más familiar para quienes
empezamos a jugar con ellos y hoy tenemos alrededor de cincuenta años.

 El "Sistema de juego
LEGO" tenía en un principio 28 ladrillitos y 8 piezas de repuesto adicionales.
Sin dudas fue toda una revolución en el mundo del juguete, puesto que permitía
que los chicos puedan utilizar toda su creatividad al jugar, haciendo sus
propios juguetes según diferentes guías, o bien su propia imaginación.

Después de algunos años,
fue creado y patentado el actual sistema de acoplado por medio de circulitos;
este nuevo adelanto, hacía a los modelos más estables y seguros. Y a medida que
pasaba el tiempo, más y más tipos de ladrillos y combinaciones eran lanzadas al
mercado, posibilitando a los jóvenes construir formas cada vez más diversas y
creativas.

 En 1958, Kirk Ole
Christiansen falleció, con lo que Godtfred Kirk Christiansen se convirtió en la
cabeza de la compañía.

Dos años más tarde, en 1950, el original negocio de
juguetes de madera fue destruido por un incendio, lo que aceleró la decisión de
discontinuar todo tipo de producción de juguetes de madera, y centrarse
únicamente en todos los juguetes de plástico, que, por supuesto, cada vez eran
más y más populares alrededor del mundo. Aún hoy en día LEGO sigue siendo un
negocio familiar, y está presidido por el nieto Kjeld Kirk Kristiansen.

A media que pasaban los
años, los ladrillos de LEGO adquirieron mayor flexibilidad y fortaleza. El
material de acetato de celulosa fue sustituido por el abs (acrylonitrile
butadeine stryrene) en 1963, lo que hizo a las piezas más brillantes, con una
mejor calidad de color, y mucho más duraderas.

 En 1967, LEGO lanzó la
marca DUPLO, una versión de ladrillos más grandes para los niños por debajo de
los cinco años. Para 1969, año de la llegada a la luna, sacó a la venta la
versión internacionalmente de un cohete espacial, mientras que los padres de
todo el mundo aprovechan la oportunidad de poder, muy tranquilos, dejar jugar a
sus hijos jugar con los juguetes más seguros y creativos.

Durante los siguientes
veinte años, LEGO haría punta en el rubro de los robots y en las personas
articuladas en miniatura, así como en los diseños de los autos clásicos en
escala, los cual tenía como objetivo el público adulto.

 Con los ladrillos de
LEGO, se reconstruyeron extensos parques temáticos en escala, los cuales se
exhiben al público en centros de exposiciones y convenciones. Además, se crearon
programas de computadora para jugar con su propio conjunto de LEGO virtual, así
como también para fabricar formas en el ciberespacio.

Actualmente, se producen
millones de ladrillos de LEGO, aunque también es cierto que, durante los
noventa, la producción  mermó bastante a causa de la competencia de los
videojuegos para PC. Pero sus autos, aviones, y castillos, continuaran armándose
en nuestra memoria.