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La verdad sobre los edulcorantes naturales

El néctar de agave y otros edulcorantes promocionados como “naturales” estan de ultima moda. ¿Son realmente saludables, o es todo una estrategia de marketing?


Es posible que lo haya visto en una cafetería o que sea un ingrediente de su
comida favorita.

Generalmente anunciado como "natural", el néctar de agave se
hizo popular hace unos años como una alternativa saludable al
azúcar refinado, o
la miel.

No mucho después, nutricionistas y expertos en salud determinaron que
este edulcorante no necesariamente es más saludable que otros productos.

Si bien
el néctar de agave está hecho a partir del jugo de un cactus mexicano, se
procesa de una forma que no genera ninguna ventaja nutricional (o calórica)
respecto del azúcar común.

Si usted desea comprender el amplio mercado de los
edulcorantes, hay varias cosas que debe tener en cuenta.


Entienda el significado de "natural"


La popularidad inicial del néctar de agave se debe, en parte, a la creencia de
los consumidores de que los alimentos anunciados como "naturales" son, de alguna
manera, más saludables.

Si bien es cierto que los alimentos que están menos
procesados generalmente son más saludables, la palabra "natural" no tiene un
significado oficial regulado.


El término ‘natural’ es una herramienta de marketing muy poderosa porque,
aunque puede ser verdad, da la sensación de ser algo bueno, sin importar qué
sea
.


La próxima vez que lea una tabla de información nutricional, no
se deje engañar por esa palabra aparentemente inofensiva.


Tenga cuidado con
los endulzantes


Lo que se debe tener en cuenta al analizar el néctar de agave es que en realidad
no existe un azúcar "saludable".

Todos los
endulzantes

calóricos (agave,
sacarina, miel, por nombrar unos pocos) no son saludables, especialmente si no
se los consume con moderación.

Por eso, al elegir un edulcorante, a veces es
mejor tener en cuenta simplemente el sabor.


¿Los edulcorantes son buenos?

Son buenos en el sentido de que pueden hacer que una comida sea más sabrosa
.


A menudo los cocineros utilizan el néctar de agave desde la
perspectiva de ‘bueno, después no tendré que agregar muchos ingredientes para
conseguir un buen sabor’.

Tiene un perfil de sabor que va más allá de lo
”dulce”".

Lleve un registro de su consumo diario de azúcar


En promedio, las personas consumen más azúcar que la cantidad saludable. Dado
que los azúcares aportan cero nutrientes y muchas calorías adicionales, que
pueden generar un exceso de peso o incluso obesidad, es importante limitar el
consumo de azúcar.


La Asociación de

Car
diología de EE.UU. recomienda que las
mujeres limiten su consumo de azúcar añadido a no más de 100 calorías por día,
es decir, 6 cucharaditas de azúcar.

Para los hombres, lo recomendable es no
pasar de las 150 calorías diarias, alrededor de 9 cucharaditas.

Al leer la información nutricional, asegúrese de tener en cuenta los azúcares añadidos que
aparecen bajo diferentes nombres, como agave o miel.


¿Qué pasa con los edulcorantes artificiales?


El uso de edulcorantes artificiales es un tema que genera discusiones.


Desde un punto de vista científico, las investigaciones están divididas. Desde
el punto de vista de la FDA, son reconocidos como generalmente seguros.

Desde un
punto de vista nutricional, no son nutritivos, lo que significa que no aportan
calorías ni nutrientes a nuestra dieta.


Algunos argumentan que los edulcorantes artificiales son una buena opción, ya
que pueden ser útiles para controlar la ingesta de calorías.


Los detractores
dicen que los edulcorantes artificiales generan el impulso de comer otros
alimentos dulces, y contribuyen al síndrome metabólico y otras enfermedades.


Debido a que los edulcorantes artificiales son muy dulces (más que el azúcar
común),

los especialistas

advier
ten
que puedan cambiar su paladar y alterar su percepción
de lo dulce.

Esto puede generar que usted rechace la dulzura natural de las
frutas y verduras.


Intente engañar a su paladar


Mucha gente está perdiendo el aprecio por la dulzura natural de una simple
fruta
.
Como experimento,

re
duzca los edulcorantes añadidos de su
dieta durante dos semanas.

Durante este período, elija alimentos que contengan 5
gramos de endulzantes o menos por porción, evite los edulcorantes artificiales y
que agregue frutas a sus alimentos, para aportar sabor y nutrientes.

Después de
dos semanas, sus papilas gustativas se habrán ajustado, y
usted
podra

comenzar a apreciar la dulzura incluso en una verdura.

Isabel de los Ríos, nutricionista certificada,
es autora de "Comer para perder",
una obra que utiliza un enfoque original y alternativo para
adelgazar en forma
permanente y saludable
.

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