Fortalecer los músculos centrales del cuerpo nos proveen de la estabilidad y el
poder necesarios para sostener en forma adecuada todo el cuerpo.
Los abdominales
son parte de este grupo de músculos centrales, así que ya sabes lo que pueden
hacer por ti desde el punto de vista funcional —y ni hablar desde el estético—.
Paso 1
En primer lugar, encuentra un compañero que pueda ayudarte. No se requerirá de
un gran esfuerzo por parte de éste, de modo que cualquiera que sea capaz de
estar de pie y tenga algo de fuerza en los miembros superiores podrá cumplir la
tarea a la perfección.
Paso 2
Recuéstate de espaldas sobre el suelo, ubicando tu cabeza entre los pies de tu
ayudante.
Paso 3
Lleva los brazos hacia atrás y sujeta a tu ayudante de los tobillos o de las
pantorrillas. Esto te proveerá de la estabilidad necesaria para realizar el
ejercicio en forma adecuada.
Paso 4
Flexiona ligeramente tus rodillas y levanta lentamente tus piernas hacia el
cuerpo de tu ayudante. Presiona la parte superior de tu espalda contra el suelo
y siente cómo cada vértebra de tu columna vertebral se desliza sobre el piso.
Ahora levanta completamente las piernas de modo que tu compañero pueda
sujetártelas desde los tobillos.
Paso 5
Ahora, tu ayudante deberá deshacerse de tus piernas. Esto no quiere decir
soltarlas simplemente, sino empujarlas hacia delante con fuerza, de modo que
comiencen un movimiento de descenso.
Paso 6
Resiste el impulso descendente de las piernas y no permitas que tus pies entren
en contacto con el suelo. Lentamente vuelve a levantar tus piernas y permita que
tu ayudante las sujete por los tobillos.
Paso 7
Pide a tu compañero que empuje tus piernas en diferentes direcciones.
Arrojándolas hacia un lado (al menos 45 grados), lograrás trabajar los músculos
abdominales oblicuos. Al mismo tiempo, los empujones al azar te permitirán
fortalecer los abdominales y la coordinación.
Si
quieres
ganar músculo sin drogas,
ni suplementos sin valor, haz
clic
aquí ahora
|