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Física o química, comentarios y criticas a la serie

Física o Química, es una de las tv series española que pretende reflejar a los adolescentes de hoy en día, pero…… ¿son, o deberian ser , realmente asi?

Física o
química es una serie producida por Ida y vuelta, emitida en Antena 3 que este
año ha conseguido el premio Ondas a la mejor serie de ficción española. Su
objetivo principal es mostrar cómo se enfrenta un grupo de profesores novatos
ante la tarea de dar clase a adolescentes, describiendo la situación que se
respira en las aulas (en un intento de mostrar aquello que sucede en la
realidad).

Falta de respeto hacia los docentes e
indisciplina, son sólo algunos de los ejemplos que puede ver en cada capítulo
el espectador de las historias protagonizadas por los chicos y chicas del
Zurbarán.


Sin
embargo, pese a que el escenario principal sea un instituto, conviene destacar
que la serie apenas muestra la vida académica y de estudio de los adolescentes,
se centra mas en la vida sentimental y sexual de sus protagonistas hasta el
punto de que ofrece una banalización absoluta del sexo, hecho que refleja el lenguaje que utilizan los
jóvenes.

También en la rapidez con la que cambian
de pareja, en la exaltación de la importancia del placer (no del amor) y por la
edad tan temprana en la que comenzaron a tener sus primeras experiencias
sexuales (hasta el punto de que aquellos que no las habían tenido todavía con 16
años, llegaban a considerarse raros). 

Es cierto que en la adolescencia las
emociones se vuelven extremas hasta el punto de que el enamoramiento se vive de
forma muy intensa porque todavía no se ha forjado completamente la personalidad.


Sin
embargo, existen muchas otras experiencias, además del enamoramiento, que
definen a un ser humano: Física o Química ofrece la imagen de unos adolescentes
sin inquietudes, desmotivados e incluso un tanto abandonados a su suerte.


La
serie se ha centrado tanto en la vida sentimental de sus protagonistas que la
única forma de continuar el argumento es seguir explotando este tipo de tramas,
aun a costa de su poca verosimilitud. 


Uno de los temas más delicados que ha
tratado la serie ha sido el de los abusos sexuales, un tema que fue tratado de
forma irresponsable puesto que los guionistas ni siquiera decidieron que la
chica debía poner una denuncia a su agresor ni mostrar el sufrimiento real que
padece una víctima de este tipo de delitos.


En esta
línea, conviene destacar que la infidelidad es una idea muy repetida en la serie,
no sólo en las tramas adolescentes sino también en las historias protagonizadas
por los profesores (que en algunos casos llegan a extralimitarse en su relación
con los alumnos).

Por otra parte, muchas tramas tienen como tema de fondo el
sexo: en la actualidad, un embarazo de una alumna, Paula, que tuvo una historia
de un día con uno de sus compañeros, en el pasado, una de las profesoras,
Olimpia, se queda embarazada y duda sobre la paternidad de su hijo al haber
mantenido relaciones sexuales tanto con su marido como con otro compañero de
trabajo, también, otro profesor comienza una relación extramatrimonial justo en
el momento en que le diagnostican una grave enfermedad. 

Estos son ejemplos aislados
que ayudan a visualizar los valores de fondo que vende la serie, unos valores
poco educativos para un público adolescente muy influenciable que está en pleno
proceso de crecimiento.

Física o
Química habla mucho del sexo, pero muy poco del amor, hasta el punto de que en
muchas ocasiones equipara el placer con la felicidad dentro de una filosofía de
vida propia del “carpe diem”: disfrutar del aquí y del ahora sin pensar en
responsabilidades ni en las consecuencias de los actos, una visión del sexo que
en muchas ocasiones va unida a una idea utilitarista e instrumental de la
persona.

Un ejemplo muy gráfico de este hecho es el de la celebración de una
fiesta organizada únicamente con el fin de practicar “peeting”.


La
adolescencia es una edad en la que como bien muestra la serie, necesita del
apoyo y la pertenencia de un grupo de amigos para reforzar la propia identidad y
autonomía frente a la figura de los padres, que establecen determinados límites.


Esta figura esta prácticamente invisible en la serie que refleja muy pocas escenas de
la vida familiar, en la que los progenitores sean un modelo y un referente para
sus hijos en su camino hacia la madurez. No aparecen ejemplos de conversaciones
cotidianas ni muestras de diálogo intergeneracional, no sólo paterno-filial sino
tampoco con abuelos, hermanos, primos etc.

Además, la familia es uno de los
mayores bienes que tiene la persona a cualquier edad, como muestran precisamente
las consecuencias psicológicas tan graves que puede producir, por ejemplo, el
desarraigo.

Es curioso que casi siempre que se crea una serie española centrada
en la vida de un grupo de adolescentes, prácticamente no exista ningún reflejo de
la vida familiar que cualquier persona tiene a esa edad, sucedió lo mismo con la
serie de Telecinco “Al salir de clase” y en la actualidad sigue la misma
tendencia “Diario secreto de una adolescente” emitida en Antena 3 donde una
chica de 16 años tiene una historia de amor con un hombre de cuarenta años.


En la
realidad, a diferencia de lo que sucede en el instituto Zurbarán, los
adolescentes van al colegio para aprender y estudiar, y en muchas ocasiones,
también acuden a actividades extraescolares. Ademas,  tienen que hacer deberes en casa
cada día.


En la misma línea, los alumnos de esa edad toman conciencia de la
importancia que tiene la elección del futuro profesional eligiendo una carrera
universitaria, formación profesional o cualquier otra opción laboral.

Una
decisión unida a la importancia del trabajo, la constancia, la superación
personal, el descubrimiento de la vocación, la orientación hacia una meta etc,
por esta razón, los adolescentes a diferencia de los protagonistas de la serie,
disfrutan del tiempo de ocio principalmente el fin de semana y tienen una hora
concreta para volver a casa.  


“Física
o Química” muestra una visión distorsionada de la adolescencia como etapa vital
y de la experiencia del enamoramiento a esa edad, se trata de una serie que gira
en torno al mundo adolescente que contradictoriamente es muy poco apta para un
público de esa edad, porque transmite irrealidad.


Está claro que en la realidad
se dan casos de adolescentes embarazadas, de chicas que acuden al médico para
tomar la pastilla del día después o matrimonios que rompen como consecuencia de
una infidelidad, sin embargo, también son muchos los matrimonios que pasan
juntos toda la vida, los noviazgos estables, los casos de alumnos educados que
son buenos estudiantes…

Curiosamente, en la serie no hay ni un solo personaje
que ejemplifique estos casos de estabilidad familiar sino que en muchas
ocasiones, los propios personajes adultos llegan a tener comportamientos
caracterizados por un patrón inmaduro y adolescente.


El
público juvenil necesita valores y un modelo adecuado de conducta para crecer
bajo unos criterios éticos fundados en el bien integral de la persona, una
orientación que todavía es más importante a esa edad puesto que la adolescencia
es un periodo difícil en el que los jóvenes tienen que hacer frente de forma
muy rápida a todos los cambios que se producen en su cuerpo y en su personalidad
en poco tiempo.


Es verdad que es una etapa caracterizada por la rebeldía
interior hacia los padres, y en general, hacia toda figura que se relaciona con
la autoridad, y también es cierto, que como consecuencia de esta crisis de
crecimiento, a los alumnos les resulta mucho más difícil concentrarse delante de
los libros.

La adolescencia es una etapa vital importante y positiva en el
proceso de crecimiento, sin embargo, los adolescentes que muestra Fïsica o Química son unos jóvenes con demasiada prisa por hacerse mayores dentro de un
concepto equivocado de libertad.


Como
conclusión, me gustaría decir que no hay que perder de vista que los adolescentes
de hoy son los adultos del mañana, por tanto, conviene apostar por la educación
en valores no sólo en casa, sino también en las aulas y finalmente en la
televisión a través de la protección y el cumplimiento de la ley del menor que
tantas veces se infringe incluso en horario de tarde.


El cumplimiento de la ley
del menor, es tarea y responsabilidad de todos como espectadores adultos que
simplemente deben hacer uso del sentido común, a través del mando a distancia:
apagando la tele o cambiando de canal.


Por Maite
Nicuesa Guelbenzu

Doctora
 en filosofia


www.tallerdeieyfilosofia.blogspot.com