Share on facebook
Share on twitter
Share on whatsapp

El uso del mail en las campañas de marketing

Es bueno tener en cuenta pequeños detalles para no perder al usuario antes de que nos conozcan…

Hoy nos encontramos con un cliente que nos dice: “yo tengo la base de datos para mandar las invitaciones”. Le pregunto si realmente son personas interesadas, como creo esos datos y finalmente si tiene algún tipo de “limpieza”.

Por supuesto que es una lista de mil mail generados por el envío de un Power Point que recomienda su reenvío a diez amigos o sino no nos casaremos jamás.

Esta idea de lo masivo, de lo “enviar a mil personas para que diez nos conteste” es un error GRAVE ERROR. Esta bien, diez personas nos contestan y ¿las otras novecientas noventa restante?… nos odian! y ponen nuestro mail como “no deseado”, desde ese momento hasta nuestro gentil correo de “feliz cumpleaños” le llegará a la casilla de spam.

¿Que pasos tendría que tener en cuenta para que este porcentaje de aceptación crezca y sobre todo para no terminar en el correo basura?

El secreto esta sobre la base de datos, si tenemos una limpia (mails que realmente existen), si podemos segmentar la información y no hablo por región, por genero, por edad, etc. hablo de una segmentación real, por gustos y tendencias.

Si tenemos el nombre del dueño del mail y mejor, si logramos conseguir más información sobre el es fantástico.

Ahora, esto solo se consigue a través de suscripciones a newsletter, apoyados en un concurso, formulario de consulta o inscripción a una web, no copiando y pegando cadenas de mails.

Personalmente no soy partidaria de disparar a todo lo que se mueva, es decir a enviar a una super base de datos comprada con más de 1.000.000 de registros, no funciona.

Tratemos de generar una base de datos propia, usando todos los recursos que se nos ocurra y trabajamos sobre ella antes de decidir hacer el gran envío.

Una vez que tenemos el elemento principal y más importante ahora el desafío crear un mail que realmente de ganas de abrir.

Antes las palabras, “gratis”, “promo”, etc. eran detonantes geniales, hoy no!. La gente se asusta, cree que se le abrirán mil imágenes con chicas desnudas o peor un super virus le romperá su computadora.

Seamos honestos y busquemos un asunto que llame la atención pero no tanto, lleguemos al interés del usuario.

Bueno ahora todo cierra, como puedo poner un asunto que interese si no tengo idea quien lo recibirá, y regresamos a la base de datos que nosotros trabajamos, estudiamos, segmentamos y construimos día a día.

Ya tenemos la base de datos, el asunto y vamos a construir el mensaje

Eso se los dejo a los publicistas, pero si es importante no olvidar que si usamos una imagen esta tenga soporte en la web (se cargue de allí, no mandan imágenes adjuntas), no se olviden del: “si no ve la imagen haga clic aquí” y finalmente “si no quiere recibir más este mail escribanos a este correo”.

Listo, mandamos el mail estamos felices ¿y el ROI (Return on Investment)?.

Tenemos que estudiar el retorno, ver las estadísticas del sitio o bien las consultas que se generan a partir de esta campaña.

Estar atentos de los envíos de mails con consultas que se generen y sobre todo no dejar de decir: “inscribí a un amigo que le pueda interesar”, trabajar sobre la base de datos, registrando nuevos mail, completando datos de los clientes y usuarios y preparándonos para un nueva tirada de correos.

Por Ing. Guadalupe Cano León
314e-consulting.com

¿Quieres conocer todos los secretos del copywriting, para aprender a vender mediante la palabra? Inscríbete ahora en nuestro curso gratis de Redacción Publicitaria y ¡comienza a ganar!