Cada tipo de piel tiene su cosmético
apropiado, solamente hay que conocerse para saber elegir sin equivocarse. Cada
temporada, los maquillajes se renuevan y sus colores innovadores hacen que las
mujeres se dejen llevar por lo que les gusta y no por lo que les sienta mejor.

“Es
muy normal que una mujer se sienta influenciada por lo que dicta el mercado de
la estética, cada vez  hay más opciones y variedades al alcance de la mano, todos
esos colores que tan bien sientan a las modelos hacen que perdamos la
perspectiva de lo que realmente necesitamos consumir y que mejor queda según la
piel que tengamos”, sostiene la esteticista argentina Ana María Escolar.

Pieles claras:

Son las más codiciadas, pero también
las más difíciles de retocar ya que en ellas se nota todo. Las mujeres de piel
muy blanca suelen tener venitas de color azul que se les nota, y pueden
maquillarse con corrector de tinte claro tirando a dorado que resaltará la piel,
esconderá lo que no gusta y le dará un mejor aspecto a una piel que necesita un
poco de brillo.

 Las mujeres con este tipo de piel deben tener en cuenta que
necesitan resaltar su aspecto sin caer en tonos demasiado agresivos, las sombras
para los ojos en tonos ciruela o dorado son ideales. Los colores pasteles como
el lila lucen muy bien, los labios deben contener una tonalidad rosada o malva.

 Para lucir a la noche, los brillos en tono nacarado son
ideales, no hay que
olvidar combinar el color de las uñas con aquel que se luzca en los labios. Es
fundamental crear una armonía entre los matices del rostro con el cuerpo y su
vestimenta.

Pieles medias:

Tienen la ventaja de que pueden lucir
más colores que aquellas que llevan una piel blanca. Los tonos apagados deben
evitarse, nada de ocre o azules.

Los colores cálidos aportan la luminosidad que
este tipo de pieles necesita. El color del maquillaje debe asemejarse al tono de
la piel, nunca debe ser más claro ya que el aspecto se verá inadecuado.

Las
sombras marrones oscuras y doradas sientan muy bien, y el tono caramelo o durazno
para los labios resalta y son los indicados. Para la noche, se puede jugar con el
naranja y el rojo.

Pieles morenas:

Los tonos nacarados e intensos son
los apropiados, nada de colores pasteles ya que se desdibujarán y no se notarán
en absoluto.

Los toques brillantes dorados y plateados resaltarán muy bien la
sensualidad de la piel, y el verde esmeralda o el azul intenso son las sombras que
mejor quedan sobre este tipo de piel.

Un rojo furioso para los labios lucirá muy
sensual sobre todo por la noche, y el naranja puede utilizarse durante el día.

Los
esmaltes con efecto metálicos para las uñas son los más adecuados si van en
combinación con el maquillaje del rostro y atuendo seleccionado.

Recomendaciones:

· Por motivos de
seguridad el maquillaje debe renovarse a los seis meses de adquiridos.

· Leer las instrucciones
y asegurarse de que cumplen con los requisitos para ser utilizados sin
inconvenientes.

· Si algún producto
cambia de color o ha quedado expuesto indebidamente, lo mejor es desecharlo para
no correr ningún tipo de riesgos.

· Al maquillarse hay que
hacerlo con abundante luz para impedir accidentes indeseados, sobre todo en los
ojos, ya que muchos productos pueden provocar alergias o infecciones si no se
colocan debidamente o si se introducen en el interior del ojo sin darse cuenta.

· Es conveniente no
compartir el maquillaje con nadie más para evitar contagios como conjuntivitis o
demás problemas de la piel.

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