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Dixlesia en los niños

Entre los problemas a los que se enfrenta el niño -sobre todo los de primeros grados- en el aprendizaje, hay uno – muy serio – referido a la lecto-escritura: la dixlesia infantil…

 

 

¡Aclaración importante!: El nombre correcto de este trastorno es dislexia, pero utilizamos en el título el término dixlesia porque es una manera frecuente -aunque errónea- de escribirlo, y de no hacerlo podría no encontrar la información que necesita…

 

¿Qué es la dislexia infantil?

 

La dislexia -es la falta de comprensión del signo escrito. Es una dificultad específica del aprendizaje del lenguaje escrito, que se presenta en niños de inteligencia normal y desprovistos de deficiencias sensoriales o motrices. Se caracteriza por la existencia de errores en el encadenamiento y sucesión de los grafismos y/o en la copia y reproducción de fonismos.


¿Es o no es disléxico este niño…?

 

En el análisis del signo escrito, debemos entender la escritura como un sustituto del código verbal.  De allí que, en tanto éste es posterior a aquél, el nivel de desarrollo del primero es importante y tiene relación con la adquisición del segundo. El niño, previo al comienzo de su aprendizaje escolar, debe haber alcanzado un adecuado desarrollo del código oral y debe mostrar interés en comunicarse con otros, no ya utilizando este código eminentemente afectivo, sino a través de otros menos familiar, más social y transmisible.

 

Estos serían los indicadores de la existencia de una motivación adecuada para el aprendizaje de la lectoescritura. Una vez establecida esta motivación para el aprendizaje y en un primer momento del proceso, suelen aparecer trastornos en la adquisición y reproducción de las letras.

 

Se evidencia una propensión a confundir las letras llamadas antitrópicas p-b; q.p; d·p; y las letras semejantes: m, n, etc. Otros niños confunden letras de sonido parecido. Estas confusiones son comunes en un primer momento del proceso, pero los niños tienden a resolver dicha dificultad natural y espontáneamente.

 

Los inconvenientes en el niño disléxico

 

El problema se presenta cuando el niño persiste en la confusión de letras que aparecen, ya sea par su escritura o pronunciación, después de varios meses de aprendizaje, en tanto sus compañeros han corregida estos errores en las primeras semanas de clase. O en los casos en que invierte las letras -es necesario ponerlas frente a un espejo para descifrarlas-, o las escribe de derecha a izquierda. Otras veces, cambia la secuencia de las letras vecinas (cra por car), cambios que se encuentran sobre todo en los grupos consonánticos (tarde escrito tadre).

 

Puede también invertir sílabas enteras (amma en lugar de mamá), toda la palabra (enen en vez de nene) o agregar letras a la palabra (biein por bien). En la escritura de frases enteras presenta la dificultad de no separar correctamente los elementos de discurso (lacampaña par la campaña). Pueden darse asimismo omisiones de letras o sílabas (mecamento en lugar de medicamento y cata por carta). A estos problemas se suman los de la lectura.

 

El niño no lee. Adivina asimilando las palabras desconocidas a las ya conocidas o inventando términos. El resultado es la falta total de significado y de comprensión de lo leído.

 

 

Causas de la dislexia en los niños

 

Estos trastornos que aparecen en relación con el aprendizaje de la lecto-escritura están asociadas a dificultades en el desarrollo de funciones esenciales. Existe un cierto grado de correlación entre las imposibilidades del niño frente a este aprendizaje y la existencia de trastornos en el lenguaje oral, en la estructuración espacial y la lateralización, en la estructura temporal rítmica y en su personalidad total.

 

Características de la dislexia

 

El déficit en el desarrollo del lenguaje no determina necesariamente el surgimiento de dificultades de aprendizaje, pero el retraso en su adquisición constituye, en general, uno de los factores posibles y uno de los más importantes, pues la escritura es el más alto nivel del lenguaje. Su adquisición y desarrollo muestra la relación y la comunicación del niño con el medio. La orientación espacial y la estructuración del esquema corporal, son dos adquisiciones que realiza durante su evolución y que le permiten distinguir el yo del no-yo, lo que está contenido dentro de los límites de su cuerpo y aquello que es exterior, lo que está situado delante o atrás, arriba o abajo, a derecha o a izquierda. Su propio cuerpo es el sistema de referencia para que el universo sea estable y está en relación con el proceso de transformación de lo tridimensional a lo bidimensional del plano, con la posibilidad de ubicarse en forma ordenada, respetando el renglón, los márgenes, los límites de lateralización, o sea, el predominio diestro o zurdo de ojo, mano o pie. La existencia de lateralidad cruzada o indefinición de la lateralidad, están también asociadas a la dificultad que nos ocupa dado que nuestro idioma es de lateralización diestra. La escritura y los grafismos van de izquierda a derecha y es el ojo el que ordena la lateralización de la mano. Su trastocamiento puede provocar perturbaciones analíticosintéticas, fallas en el orden de las secuencias en el antes y el después. Dado que la lateralización aparece y se afirma en el curso de la maduración del niño y que hay quienes se lateralizan rápidamente y quienes no se han lateralizado aun al ingresar a primer grado. Es probable también que está esté en relación con el medio e influenciada por éste.

 

La orientación espacial

 

Sé construye poco a poco y permite al niño ubicar el antes, el después, el ahora, el ayer, el hoy, el mañana. Pero el aspecto más importante de la estructuración temporal en relación con el aprendizaje de la lecto-escritura, es la posibilidad de reproducir ritmos. Los que no pueden captar y reproducir adecuadamente el ritmo del lenguaje oral, confunden las secuencias y separan o juntan arbitrariamente las palabras.

 

 

Tratamiento de la dislexia

 

Por otra parte, no es posible hacer abstracción de los factores afectivos y sociales en relación con la dificultad de aprendizaje, porque la lateralización, el desarrollo del lenguaje, el esquema temporal, estructuración espacial, etc. son también objeto de aprendizajes que se realizan dentro de un cierto ambiente social y afectivo y que necesitan de una motivación adecuada. Por todo lo señalado, vemos entonces que la dislexia se presenta asociada a factores constitucionales, afectivos y pedagógicos y se expresan como un síntoma severo y circunscrito. Su existencia debe visualizarse como la expresión de una problemática que requiere la consulta psicopedagógica, que permite detectar la perturbación global del sujeto y sus características de personalidad, que inhiben la superación de la dificultad. De este modo, nos ocuparemos del niño como una totalidad y lograremos ayudarlo a la integración armónica consigo mismo y con el medio. La colaboración estrecha de los padres con el psicopedagogo se hace, entonces, imprescindible.

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