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Cómo cuidar un bonsái

Lo que debes saber para cuidar ese bonsái que te regalaron o compraste en un impulso…

Consulta de Chispita en el foro de Jardín y decoración de EnPlenitud: 

Tengo un bonsái, pero las ramas ya están muy crecidas, y no sé si recortarlas o no, ya que en cada una de ellas, se ve un retoño de mas hojas ¿Qué debo hacer?” 

Respuesta de Angeluzmio: 

Mira, para que te hagas una idea un bonsái es un arbolito, y no un arbustito como se suelen vender ahora porque quedan lindos. Se denomina bonsái cuando pasa de los 6 años de vida.

La idea es que ese arbolito crezca y envejezca en una macetita así como lo haría en la tierra, pero eso sí: rodeado de mucho más amor tal vez del que tendría en la tierra, ya que el dueño lo rodea de mucho cariño y paciencia.

Lo que hay que hacer día a día es cuidar que no crezca desmesuradamente. Algo así como lo que decía mi abuelita de sus plantas: "que no se vaya en vicio". Para lograr esto tenés que ir "despuntando" -o sea cortando- con los dedos los brotes que van creciendo en la punta de las ramas.

Así lográs ir dándole la forma y tamaño que vos quieras, cosa que depende también del tipo de arbolito que sea.

También a veces se dejan crecer las ramas largas para ir dirigiéndolas y dándole forma (cosa que suele hacerse con los pinos, si es que alguna vez viste alguno sabrás lo que trato de decirte, ya que sus dueños logran formas hermosísimas).

Se dirigen acompañando la ramita con alambre y ir dándole la formita que uno desee. Es bueno cuando uno "despunta" o poda colocar luego cola plástica para que no entre ningún "bichito" aprovechando la abertura que queda.

También se les hace un "servicio" anual que podés llevar a que te lo hagan donde lo compraste o en algún lugar en  que se dediquen a vender bonsái. O sea: alguien que sepa para que no se te muera la plantita.

El servicio consiste en podar las ramitas que creamos que no sirven para la forma que uno quiere que tenga (y no olvidar colocar la cola plástica ¡ojo!).

También se saca la plantita de la macetita, se limpia toda la tierra de las raíces y así -dejando a la vista las mismas- se corta parte de la raíz principal y de las raíces restantes (hacerlo lo más rápido posible para que la plantita no sufra demasiado). 

Luego se vuelve a colocar en la misma macetita (ahora verás que hay más lugar para que la plantita vuelva a seguir creciendo hasta el año siguiente, en que se hace nuevamente el servicio) y se le agrega tierra nueva y todos los nutrientes que tomaría naturalmente de la tierra si estuviera en ella.

En cuanto a los nutrientes: dependen de qué planta tengas. Por ejemplo: harina de hueso, harina de sangre (sobre todo para los pinos), cáscara de huevos triturada (casi como polvo), etc. 

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