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Cómo cuidar el césped

Secretos del riego del césped y el combate a las plagas que lo ponen en riesgo

Riego del césped

El césped requiere riego moderado en invierno, siempre por la mañana, cerca del mediodía, y regular e intenso en  verano, preferentemente por la noche, para que se mantenga por más tiempo la humedad, y por inundación (es decir, dejando la manguera sobre la tierra y corriéndola cuando el área se haya inundado).

Si en invierno se regará por la noche, la conservación de la humedad favorecería la formación de hongos. Para combatir esta plaga, bastante frecuente, se tratarán con un buen funguicida soluble en agua los amplios sectores manchados de oscuro que la caracterizan, en los que va desapareciendo el césped. 

Plagas: grillos y hormigas 

Otra plaga, también muy común, es el grillo de jardín o “grillo topo". No son negros sino color canela, más grandes que Ios otros. Trabajan en forma subterránea, cortando con sus pinzas las raíces del césped y formando generalmente círculos en los que éste se seca.  

La forma de acabar con ellos es buscar el orificio de pequeños montículos de tierra, como los que forman las hormigas, y echar con un embudo un chorrito de detergente común lavavajilla o unas gotas de aceite quemado. 

Estos son eficaces tratamientos caseros. Hay sistemas de otros tipos, poco recomendables por su peligrosidad, como regar al área invadida con arseniato de plomo soluble, que es sumamente toxico.

Hay que exterminar las hormigas con productos efectivos incorporados al riego, ya que cuando escasean los árboles y arbustos atacan al césped si este es la única vegetación. 

Fertilizantes

En los comienzos de la primavera conviene esparcir sobre la superficie una capa de tierra cernida, no demasiado alta para que no tape totalmente el césped.

Cuidar que las puntas de los estolones se vean por entre la tierra e intensificar el riego. También es beneficioso distribuir al voleo fertilizante químico para césped, del tipo perlado. Con el riego se filtrará, alcanzando las raíces.

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