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Cirugía estética para hombres, una tendencia en aumento

Hoy más que nunca los hombres piensan que tienen razones para embellecerse, bisturí mediante. La competencia laboral y la posibilidad de corregir rasgos no deseados son los motivos de este auge.

Parece
que ya no corre más ese estigma con el cargaban los hombres a la hora de
mejorar su aspecto. Con el énfasis actual que la sociedad pone en valores tales
como el bienestar físico, el ejercicio, la buena alimentación y la apariencia,
es casi una obligación sentirse bien, y el aspecto exterior debe ir de la mano
con el resto del paquete.
 

Los
hombres están comprando productos de belleza, como aquellos destinados al
cuidado de la piel, en una proporción cada vez mayor. Una estadística de fines
de 2003 señala que el mercado de productos de belleza para hombres, que
representa entre 5 y 10% de productos de belleza en general, es el sector con
mayor crecimiento anual con un 21%. Y este fenómeno no sólo se da entre los
mayores de cuarenta.
 

Los
hombres de entre veinte y treinta años que se criaron, igual que las mujeres,
con la idea de querer alcanzar la perfección y que, como ellas, tienen
complejos relacionados con su apariencia, serían los grandes compradores del
futuro. Sin embargo, los hombres buscan productos más específicos que sus
medias naranjas, como cremas anti-fatiga o anti-polución. Una conocida marca de
cosméticos llegó a afirmar en su sitio web que hoy día el 21% de los hombres
utilizan productos para el cuidado de la piel, en comparación con el 4% que lo
hacía en 1990. Y estimaron, según proyecciones propias, que la cifra alcanzará
el 50% en 2005.
 

Entonces,
es un hecho que ellos ya no solo se bañan, afeitan, y peinan el cabello. Ahora
es tiempo de pulirse las uñas o visitar regularmente al podólogo. Visto desde
esta perspectiva, la cirugía estética es un paso lógico que sólo era cuestión
de tiempo.
 

Los
hombres se inclinan hacia las cirugías estéticas en buena parte como un modo
de revitalizar sus carreras laborales. En vista de que la competencia de los
colegas de menos de treinta se incrementa cada vez más, los que cruzaron la
barrera de los cuarenta son la franja etaria más proclive a rendirse ante las
promesas del bisturí, creyendo que un rejuvenecimiento de la piel tendrá el
mismo efecto sobre su carrera laboral.
 

Entre
las cirugías más comunes que eligen los hombres están los estiramientos
faciales, la eliminación de las bolsas debajo de los ojos, los implantes de
mejillas, la mentoplastia (cirugía para reformar o reconstruir el tamaño del
mentón), la liposucción, los implantes pectorales y de pantorrillas. El
modelado del cuerpo es una de las causas fundamentales que los lleva a tomar la
decisión de operarse. Además de la conocida liposucción, una de las
intervenciones quirúrgicas habituales entre los hombres es la reducción de
pechos (ginecomastia). También las muy promocionadas operaciones para agrandar
el pene (faloplastia) son todo un éxito. Para no hablar de los microimplantes
de cabello, que también están en boga desde hace un tiempo, al igual que la
corrección de las estrías abdominales (abdominoplastia).
 

Y
el último grito de la moda son las inyecciones de Botox (toxina botulínica),
una manera de combatir las arrugas sin pasar por el bisturí. Este tratamiento
permite mantener los músculos de la cara relajados, y de esta manera planchar
las líneas y las arrugas producidas por los gestos. La cantidad de toxina que
se usa para este tratamiento es mínima, por eso, las pacientes no corren ningún
riesgo. El Botox disminuye la actividad del músculo y debilita su potencia. Los
mejores resultados se ven en las arrugas de expresión: entrecejo, patas de
gallo y arrugas horizontales de la frente. Al aplicar la sustancia se consigue
que los músculos no se contraigan con tanta fuerza.
 

También
los hombres se aplican inyecciones de colágeno con fines estéticos, se
remueven pelos de lugares no deseados con laser o se someten a tratamientos de
peeling en su piel. Esta técnica consiste en la aplicación de un producto químico
sobre la piel, a través de cuya acción se produce una peladura (peeling) de
aquella, que será proporcional a la naturaleza y a la concentración de aquel,
al tiempo de aplicación y al tipo de piel. Se consigue de esta manera una
renovación cutánea global, con desaparición de lesiones y defectos cutáneos,
y mejora del tono y textura de la piel.
 

Pase
y vea
 

Si
está pensando en modificar algún aspecto de su cuerpo, aquí va una lista de
las intervenciones quirúrgicas más comunes que piden los hombres, para que
sepa a grandes rasgos en qué consiste cada una:
 

*
Mentoplastia: Es la cirugía para reformar o reconstruir el tamaño del mentón
con el fin de restaurar la armonía facial y la proyección del mismo. Lo mas
habitual es la colocación de un implante (silicona, Goretex) por delante del
mentón, para aumentar su proyección. Ocasionalmente se puede cortar la parte
mas inferior del mentón y avanzarlo los milímetros que se necesite.
 

*
Bichectomía: Para la armonización del entorno
facial 
 

*
Lifting o Rejuvenecimiento facial, es una intervención quirúrgica para reparar
la piel de la cara y cuello marchita, arrugada y hundida que se produce por el
paso del tiempo, por una dieta alimenticia pobre o también por tendencia
hereditaria. Se realiza quitando el exceso de grasa, tensando los músculos
principales, y rellenando la piel de la cara y cuello.
 

*
Lipoescultura o Corrección Estética de grasa mal localizada: Se le conoce como
“cirugía sin bisturí”. En ella no existe ningún tipo de cirugía plástica,
y aun así moldea el cuerpo a la vez que elimina los volúmenes de grasa que lo
deforman. Esta técnica, es la alternativa ideal, que elimina los problemas de
la liposucción tradicional.
 

*
Abdominoplastia o Corrección de estrías abdominales: Procedimiento quirúrgico,
que tiene como objetivo remover el exceso de piel y grasa del abdomen y tratar
los músculos para mejorar el contorno, produce una cicatriz transversal a nivel
abdominal inferior que puede ir de cadera a cadera, de tal forma que queda
escondida dentro del vestido de baño o ropa interior.   

*
Faloplastia: aumento del tamaño del pene
 

*
Gluteoplastia: Para el aumento y/o levantamiento de los glúteos, normalmente se
realizan implantes con diseños especiales de glúteos o con tejido de grasa
propia. Para la reducción y alzando de los glúteos, normalmente se realiza una
liposucción superficial o una “tanga lift”.
 

*
Rinoplastia o modificación de la línea de la nariz: sigue siendo una de las
intervenciones más solicitadas tanto en hombres como en mujeres.
 

*
Ritidoplastia: alisamiento de arrugas en cualquier parte del rostro, de manera
preferencial las llamadas patas de gallo o las que se presentan alrededor de la
boca y en las líneas de expresión.
 

*
Blefaroplastia: cirugía de los párpados.
 

A
tener cuidado
 

La
cirugía estética no es recomendada para personas menores de 16 años. La razón
principal es que aún se encuentra su cuerpo en desarrollo. Otras salvedades
para hacerse una intervención incluyen:
 

*
Personas con trastornos del sistema inmune.

*
Enfermos de cáncer.

*
Personas con diabetes mal controlada o no controlada.

*
Personas con hipertensión no controlada.

*
Personas con alteraciones o trastornos cardíacos.

*
Personas con traumas síquicos.

*
Personas mayores de 65 años que, después de evaluación clínica, no presenten
condiciones satisfactorias de salud.